San José – Costa Rica registró este viernes un récord diario de 18 fallecidos por COVID-19, con lo que la tasa de letalidad se ubica en el 0.99 %, mientras que la cantidad de contagios del día fue de 1,011 personas para un total de 22,081 a lo largo de la pandemia.
El ministro de Salud, Daniel Salas, expresó en conferencia de prensa que los 18 fallecidos son personas con edades entre los 27 a 91 años y que el total de muertes ascendió a 218, la mayoría con factores de riesgo como diabetes, hipertensión, y obesidad.
«Tenemos una tasa de letalidad que es baja en comparación con otros países pero es claro que ha venido aumentando. Entre más casos graves, más aumentará la tasa (…) También con tantos casos diariamente algunas personas consultan tardíamente y con un estado deteriorado de la salud», afirmó Salas.
El ministro explicó que de la cantidad de infectados de este viernes, 496 fueron diagnosticados a través de pruebas, y los restantes 515 por nexo epidemiológico, ya que presentaron síntomas tras convivir con una persona positivo.
Hasta el momento un total de 7,267 personas se han recuperado y se reportan 373 personas hospitalizadas en la actualidad, de las que 89 se encuentran en unidades de cuidados intensivos.
El ministro Salas además reveló que el país actualmente tiene una tasa de ataque de 13 por cada 100.000 habitantes, que es «compatible con la cantidad de casos diarios».
«Ahora es el escenario más complicado que se presenta, porque el virus está donde hay más densidad poblacional y ese escenario lo pone en una escalada difícil. Además, se da en medio del desgaste de la población que quiere que el virus se vaya, es preocupante pero es parte de la dinámica de una pandemia (…) Esto puede tomar dos meses o un poco más para una disminución de los casos, pero eso depende mucho del cumplimiento de protocolos», dijo el experto.
Durante el mes de agosto, Costa Rica aplica un plan con dos periodos de apertura limitada de actividades de nueve días cada uno, y un periodo de cierre de 12 días que comenzará el lunes próximo.
En apertura se podrán retomar actividades con un aforo del 50 % en gimnasios, tiendas, restaurantes, salones de belleza, espacios religiosos, turismo de aventura, museos y academias de arte, entre otros.
En la etapa de cierre, los vehículos solo podrán circular un día entre semana y uno del fin de semana según la placa y se hará una clausura total de establecimientos con atención al público. En esa fase solamente podrán abrir servicios básicos, como supermercados, farmacias, panaderías o centros médicos.
