Tegucigalpa– La consejera del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cosette López, dejó este jueves la presidencia del organismo con un discurso marcado por recomendaciones y señalamientos sobre las debilidades en la observación de las elecciones internas, que —según advirtió— no deben repetirse en las elecciones generales de 2025.
-En las elecciones primarias hubo credenciales escondidas, otras entregadas a última hora y personas del extranjero que participaron como observadores, sin estar acreditados por el CNE, reveló la consejera.
“Yo siempre he hablado de que no basta solo tener elecciones, sino que es importante la calidad de las elecciones. Tenemos que estar verificando los procesos sensibles, asegurando aquellos que históricamente eran considerados seguros y que ahora sorprendentemente fallan después de 40 años de trabajo eficiente”, expresó López.
La consejera expresidenta del CNE denunció que durante las primarias se dieron situaciones graves que pusieron en riesgo la transparencia del proceso, como el bloqueo a observadores nacionales, retrasos en la entrega de credenciales e incluso acreditaciones ilegales. “Haber rescatado credenciales escondidas en una caja de tintas o haber visto que se acreditaron personas que no correspondían es impresentable”, relató.
En su mensaje, López insistió en que la observación electoral no debe entenderse como una concesión del CNE ni como un mecanismo de validación externa, sino como un derecho de la ciudadanía y de las organizaciones de sociedad civil. “El amor por Honduras se demuestra con acciones y hechos, no con TikToks ni con Twitter”, señaló, en alusión a actores que, según dijo, buscan debilitar los procesos democráticos.
Sobre la observación internacional, la consejera recordó que ya se han recibido misiones exploratorias de la Unión Europea y la Organización de Estados Americanos, aunque siguen pendientes solicitudes como la de la organización Transparencia Electoral, presentada hace semanas sin respuesta en el pleno del CNE.
En cuanto a la observación nacional, reconoció que existe resistencia en algunos sectores del organismo y recordó que de las 21 organizaciones inscritas, al menos ocho provienen de gremios magisteriales que nunca antes habían participado en procesos de observación. “Soy abierta a que se participe, siempre que no se trate de personas activamente militando en partidos políticos. Para eso ya están los partidos, sus consejos consultivos y las juntas receptoras de votos. La observación es para la veeduría social”, puntualizó.
López insistió en la necesidad de aprobar pronto un reglamento que establezca requisitos claros y objetivos para la observación, advirtiendo que sin reglas claras se corre el riesgo de repetir las mismas irregularidades de las primarias.
“Espero que no estemos otra vez el último día entregando credenciales a los observadores. La observación es fundamental, pero debe hacerse con orden, acceso a información y transparencia”, concluyó.
Con este pronunciamiento, Cosette López cierra su ciclo en la presidencia del CNE, dejando un llamado urgente a garantizar un proceso electoral confiable, transparente y abierto a la veeduría social en las elecciones generales.LB
