Tegucigalpa – El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), Roberto Herrera Cáceres, señaló hoy que Honduras necesita de la cooperación internacional para tener una lucha efectiva y frontal contra la corrupción y la impunidad.
Luego de la aprobación de las reformas a la Ley de Privación de Dominio de Bienes de Origen Ilícito, por el Congreso Nacional, el defensor del pueblo recomendó al presidente de la República, Juan Orlando Hernández, que sopese bien esa situación y que no se envíe el mensaje equivocado.
Herrera Cáceres es del criterio que, ante la colisión de unos derechos con otros, se tiene que hacer un balance y una atención más esmerada y, tomar en cuenta, que la corrupción no sólo entraña daños contra el Estado sino que también contra la integralidad de los derechos humanos.
Explicó que la corrupción afecta los derechos civiles, políticos, económicos sociales culturales y el mismo derecho al desarrollo de la persona y de los pueblos.
Desde un inicio, el defensor de los derechos humanos recomendó, a la clase política, tomar en cuenta, en las reformas, principios de proporcionalidad, razonabilidad, racionalidad y, sobretodo, la ponderación de los derechos humanos para que tampoco se entienda que se están abriendo espacios para la corrupción.
“Ahora, el presidente de la República tiene eso en sus manos y le recomendamos que sopese bien este proyecto y que no se envié el mensaje equivocado”, precisó.
Destacó que la Organización de Estados Americanos (OEA), ha sido uno de los grandes impulsores de la Convención Interamericana de Lucha contra la Corrupción y que uno de sus órganos, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), acaba de emitir una resolución sobre corrupción y derechos humanos.
“Eso muestra que, en el tema de la corrupción, el aliado, para nosotros, importante, sin menoscabar la importancia de los demás, es, en este momento, la Organización de Estados Americanos”, aseguró.
Recordó que hace dos años se firmó, con la OEA, un convenio de cooperación que motivó la creación de la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad (MACCIH), para luchar contra esos dos males públicos.
Reconoció que la cooperación internacional, en el marco y contenido de este convenio, es importante y necesaria.
Agregó que es necesario implementar todas las disposiciones de ese convenio y reconocer que se necesita de la cooperación internacional para una lucha efectiva contra la corrupción y la impunidad en el país.
Consultado en torno a posibles intereses oscuros para que la MACCIH no continúe en Honduras, su respuesta fue tajante “no podemos dar un paso atrás en la lucha contra la corrupción porque esto agravaría la situación de los derechos humanos en el país”.
El ombudsman hondureño considera que se tiene que avanzar en la lucha contra la corrupción no solamente por el daño contra el Estado sino que también por el daño producido a las víctimas, dentro de la sociedad.
A su parecer, lo importante, en este momento, es buscar que las personas que han participado en actos de corrupción respondan ante las víctimas hasta lograr que se reparen los daños morales y sicológicos causados.
