Tegucigalpa – El ministro de Recursos Naturales y Ambiente, Lucky Medina dijo que velarán para que la construcción de una megacárcel en las Islas del Cisne, Caribe de Honduras, cumpla con todos los parámetros ambientales y que no se dañen las áreas protegidas.
Dijo que la presidenta Xiomara Castro fue clara en la instrucción a la Secretaría de Defensa en torno a la construcción de la granja penal en Islas del Cisne.
Apuntó que se ha valorado que las Islas del Cisne es un área protegida, por lo que deben tomarse en cuenta los requerimientos ambientales para la construcción de la llamada “alcatraz hondureña”.
Acentuó que la construcción de la cárcel “afecta en una muy poca proporción del área en base al total del área protegida y junto al Instituto de Conservación Forestal, que es el rector de las áreas protegidas de Honduras se estará llevando a cabo las inspecciones necesarias para determinar la mejor área, las mejores medidas a tomar y que el impacto sea el menor posible durante y posteriormente a la etapa de la construcción de esta granja penal”.
Medina justificó que la decisión de construir la cárcel en las Islas del Cisne se tomó con base a primar el bien común, “que prime la seguridad del pueblo hondureño y que las condiciones en Islas del Cisne son aptas para poder desarrollar actividades de seguridad”.
Resumió que acompañarán la construcción de la cárcel en el Caribe desde la etapa previa para hacer las sugerencias y las inspecciones de campo con el afán que se cumplan las medidas ambientales.
El ministro de Defensa, José Manuel Zelaya Rosales hizo un recorrido -el martes de esta semana- por las caribeñas Islas del Cisne, donde se pretende construir una megacárcel que será “el nuevo hogar” de jefes del crimen y “grandes corruptos” de Honduras.
Cabe recordar que el gobierno autorizó realizar compras directas para construir una cárcel en Islas del Cisne mediante decretos de PCM. JS