Berlín – Los conservadores de la canciller alemana, Angela Merkel, se mantuvieron hoy como primera fuerza en las elecciones europeas, según los sondeos de la televisión pública ZDF al cierre de los locales, pero con una notable caída de votos y en medio del fuerte ascenso de Los Verdes.
El bloque conservador obtuvo un 27,5 % de los votos -siete puntos menos que en 2014-, Los Verdes se convierten en segunda fuerza con un 20,5 %, mientras que los socialdemócratas sufren un nuevo descalabro y caen al 15,5 %, seguidos de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), con un 10,5 %.
Estos datos, de confirmarse, suponen un revés para la coalición de Merkel, integrada por la Unión Cristianodemócrata (CDU) y la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU) y con el Partido Socialdemócrata (SPD) como socio, que una vez más sale vapuleado de las urnas y cae doce puntos respecto a las anteriores europeas.
El bloque de la CDU/CSU acudía con el líder del Partido Popular Europeo (PPE), el bávaro Manfred Weber, como cabeza de lista común y aspirante a la presidencia de la Comisión Europea.
Los Verdes, por su parte, doblan los resultados de cinco años atrás y consolidaron así su línea ascendente, iniciada ya en sucesivos comicios regionales desde las últimas elecciones generales de 2017.
La AfD subió con respecto a sus resultados europeos de 2014 (un 7,4 %), pero el 10,5 % supone un claro descenso en relación al 12 % obtenido hace un año y medio en las generales y a escala nacional.
A esos malos resultados del SPD a escala de las europeas se suma la pérdida de la condición de primera fuerza en el «Land» de Bremen, donde hoy se celebraban asimismo comicios regionales y donde la socialdemocracia fue la fuerza dominante durante 73 años.
Según los sondeos de la ZDF, el SPD se vio ahí rebasado por la CDU, ya que obtuvo un 24,5 % frente al 26,5 % de los conservadores, mientras que Los Verdes subieron también en ese pequeño estado, de apenas medio millón de electores, hasta el 18,5 %.
Casi 64,9 millones de electores estaban convocados a las urnas en Alemania, el país de mayor peso demográfico de la Unión Europea y al que le corresponde el número más alto de escaños en la Eurocámara: 96, del total de 751.
El índice de participación, a las 12.00 GMT, se situaba en el 29,4 %, un ascenso de casi cuatro puntos respecto a la misma hora de las europeas de 2014, en las que el cómputo final, completada la jornada electoral, fue del 48,1 %.
