San José – La presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, firmó hoy una serie de reformas a la Ley de la Persona Joven, entre las cuales figura un artículo que aparentemente avala las uniones de hecho entre parejas del mismo sexo, informó hoy una fuente oficial.
El ministro costarricense de Comunicación, Carlos Roverssi, dijo a medios locales que la presidenta firmó la ley y que si existen dudas sobre su interpretación, le corresponde aclararlas a los mismos diputados o a un juez.
Agregó que la ley será publicada en el diario oficial La Gaceta en los próximos días, último paso para que entre en vigor.
Uno de los artículos de esta ley establece el derecho al «reconocimiento, sin discriminación contraria a la dignidad humana, de los efectos sociales y patrimoniales de las uniones de hecho que constituyan de forma pública, notoria, única y estable».
El texto agrega que para estos efectos no se aplicará un artículo del Código de Familia, el cual solo permite las uniones entre un hombre y una mujer.
La Reforma a la Ley de la Persona Joven fue ratificada por el Congreso el pasado lunes como uno de tantos proyectos, hasta que el martes los diputados Carmen Muñoz, del Partido Acción Ciudadana, y José María Villalta, del Frente Amplio, celebraron que un artículo de la ley permite las uniones entre parejas del mismo sexo.
Villalta ha dicho que debió buscar una «forma creativa» para avalar las uniones homosexuales, debido al «bloqueo irracional» que algunos de los diputados ejercen sobre proyectos de ley específicos en la materia que se encuentran estancados desde hace años en el Legislativo.
Entre esas iniciativas hay una acerca de las «sociedades de convivencia», con lo que se pretende garantizar derechos como el seguro social, la herencia y la pensión a las parejas homosexuales.
Según Villalta, con la nueva legislación los jueces de familia podrán decidir sobre si es legal o no una unión de hecho entre parejas del mismo sexo, basándose en el respeto a los derechos humanos.
Varios diputados, entre ellos Justo Orozco, del partido cristiano Renovación Costarricense, exigieron a Chinchilla el veto de la ley, mientras otros han dicho que el texto se ha interpretado incorrectamente.
Orozco, quien cree que la homosexualidad es «una práctica extraña ajena a nuestras costumbres», ha dicho que interpondrá una acción de inconstitucionalidad en contra del artículo de la ley para que sea la Sala Constitucional la que interprete su alcance.
Agregó que la ley será publicada en el diario oficial La Gaceta en los próximos días, último paso para que entre en vigor.
Uno de los artículos de esta ley establece el derecho al «reconocimiento, sin discriminación contraria a la dignidad humana, de los efectos sociales y patrimoniales de las uniones de hecho que constituyan de forma pública, notoria, única y estable».
El texto agrega que para estos efectos no se aplicará un artículo del Código de Familia, el cual solo permite las uniones entre un hombre y una mujer.
La Reforma a la Ley de la Persona Joven fue ratificada por el Congreso el pasado lunes como uno de tantos proyectos, hasta que el martes los diputados Carmen Muñoz, del Partido Acción Ciudadana, y José María Villalta, del Frente Amplio, celebraron que un artículo de la ley permite las uniones entre parejas del mismo sexo.
Villalta ha dicho que debió buscar una «forma creativa» para avalar las uniones homosexuales, debido al «bloqueo irracional» que algunos de los diputados ejercen sobre proyectos de ley específicos en la materia que se encuentran estancados desde hace años en el Legislativo.
Entre esas iniciativas hay una acerca de las «sociedades de convivencia», con lo que se pretende garantizar derechos como el seguro social, la herencia y la pensión a las parejas homosexuales.
Según Villalta, con la nueva legislación los jueces de familia podrán decidir sobre si es legal o no una unión de hecho entre parejas del mismo sexo, basándose en el respeto a los derechos humanos.
Varios diputados, entre ellos Justo Orozco, del partido cristiano Renovación Costarricense, exigieron a Chinchilla el veto de la ley, mientras otros han dicho que el texto se ha interpretado incorrectamente.
Orozco, quien cree que la homosexualidad es «una práctica extraña ajena a nuestras costumbres», ha dicho que interpondrá una acción de inconstitucionalidad en contra del artículo de la ley para que sea la Sala Constitucional la que interprete su alcance.
