Tegucigalpa – Se le achaca ser administradora financiera de la pandilla MS-13 en los rubros de extorsión y venta de drogas, en un sector de la capital hondureña, se llama Wendy Francisca, tiene 45 años, su ropa ajustada y juvenil le hace resaltar el sobrepeso.
– «Los ministerios públicos del Triángulo Norte tenemos en este momento identidad de propósitos», externó el fiscal Chinchilla.
– Según un reporte técnico del Departamento de Justicia de los EEUU: MS-13 es una organización criminal nacional e internacional con más de 30,000 miembros en el mundo, y más de 10,000 en los Estados Unidos.
Wendy Francisca señalada por autoridades como administradora financiera de la MS-13 en los rubros de extorsión y venta de drogas.
A diferencia de lo que ocurre con otros pandilleros que son detenidos por las autoridades y presentados ante los medios de prensa, ella no se cubre el rostro, ni busca ocultarlo de las cámaras televisivas y fotográficas, su actitud más bien es altiva.
La mujer, conocida en el mundo del hampa como “La madre revo”, fue detenida en la colonia Arturo Quezada en Comayagüela, ciudad gemela con Tegucigalpa. Su radio de acción abarcaba, dicen las autoridades, las colonias Israel, San Francisco y otras aledañas.
Junto a ella también fueron capturados un joven de 23 años de nombre Leonardo Xavier y un menor de 17 años, bautizado en el bajo mundo como “Coliflor”.
El decomiso incluyó 60 envoltorios de marihuana, 80 de cocaína, 67 de piedra blanca (crak) y armas de grueso calibre, reportan las fuerzas del orden.
El hecho solo es uno de los que cotidianamente ocurren en Honduras, donde la MS-13 y la pandilla 18 operan tras instalarse en el país y en todo el Triángulo Norte de Centroamérica, años después de haberse organizado en Los Ángeles, California, EEUU, a inicios de la década de los 80, en momentos en que salvadoreños emigraron al norte, tras la ola de violencia ocasionada por la guerra intestina que agitó ese país y lo bañó de sangre.
La extensión de las pandillas ha obligado a las autoridades a replantearse su accionar para poder combatirlas o al menos aplacar su accionar criminal.
Plataforma conjunta anticrimen
El fiscal general de Honduras, Oscar Fernando Chinchilla, dijo a Proceso Digital que la plataforma anticrimen en la que trabaja de forma conjunta con sus homólogos de El Salvador y Guatemala, con el apoyo de los Estados Unidos, busca hacerles frente a las pandillas, además de combatir otros flagelos que abaten a la región.
Para el fiscal Chinchilla es fundamental mellar las estructuras financieras de estas organizaciones para poder debilitarlas e ir más allá de capturar a los extorsionadores o a los distribuidores de drogas.
El fiscal Chinchilla considera que la MS-13 no ha recompuesto su esquema de operación. Él considera que “siguen siendo el mismo…ellos siguen igual porque es una organización tan fuerte que falta mucho para debilitar toda su estructura financiera, por lo que ahora lo vamos a trabajar a nivel regional, a nivel de fiscalías generales de El Salvador, Guatemala, Honduras y Estados Unidos”, afirmó.
Estados Unidos de su lado ha anunciado una policía de “cero tolerancia” con la MS-13.
Una ficha técnica atribuida al Departamento de Justicia de los Estados Unidos, indica que la “MS-13 es una organización criminal nacional e internacional con más de 30,000 miembros en el mundo, y más de 10,000 en los Estados Unidos. Realizan regularmente actividades de pandillas en al menos cuarenta estados y el Distrito de Columbia. MS-13 es una de las pandillas callejeras más grandes de los Estados Unidos. Los miembros de pandillas reclutan activamente miembros, incluyendo jóvenes, de comunidades con un gran número de inmigrantes de El Salvador”.
En Los Ángeles las principales zonas de influencia de la MS-13 son Rampart, Wilshire, Olympic y Hollywood, donde grupos de pandilleros llevan a cabo extorsiones.
“El Programa”
Más adelante el informe técnico plantea la amenaza del llamado “Programa”, un plan que, según dan a conocer, es ideado por jefes pandilleros de la MS-13 que están presos en cárceles salvadoreñas.
“Los líderes de pandillas en El Salvador luego instituyen lo que el MS-13 ha llamado «El Programa», en la que dirigen a las camarillas estadounidenses de MS-13 a volverse más violentas para controlar el territorio. Están tratando de lograr este objetivo no sólo matando a sus rivales, sino también extorsionando negocios legítimos dirigidos por inmigrantes legales de Centroamérica y negocios ilegales como la prostitución y los juegos de azar. Los líderes exigen que la camarilla MS-13 local, con sede en Estados Unidos, envíe una porción de los beneficios resultantes a los líderes en El Salvador para enriquecer a la banda y expandir sus actividades”, se indica en el documento del Departamento de Justicia.
Honduras, El Salvador y Guatemala también lanzaron una fuerza conjunta antipandillas.
Bloque
A tono con lo expresado con el fiscal general hondureño, el Departamento de Justicia estadounidense expresa que “Los Estados Unidos no puede derrotar solo a la MS-13: se trata de un grupo criminal transnacional, y la solución en consecuencia también debe ser transnacional. Reconociendo el papel crítico que estas relaciones internacionales juegan en el ataque a la MS-13”.
En ese enfoque refrendan lo manifestado por Chinchilla en torno a los acuerdos para construir una plataforma conjunta que involucre a Estados Unidos, El Salvador, Guatemala y Honduras, en torno a la MS-13.
“Como los ministerios públicos del Triángulo Norte tenemos en este momento identidad de propósitos, ha sido fácil identificar amenazas comunes y crear un sistema de intercambio de información”, externó el fiscal Chinchilla.
Luego dijo que “ahora que se forme el centro regional de los tres ministerios públicos contra lavado de activos, podremos realizar operaciones como “Avalancha” acá en Honduras o “Jaque” en El Salvador, de forma conjunta incluso simultánea, estimó.
Respecto a la creación del Centro Regional Contra el Lavado de Activos dijo que Estados Unidos es parte fundamental para la formación del mismo.
La MS-13 en Honduras
En Honduras la MS-13 opera en casi todo el país, pero sus principales negocios indicaron se concentran especialmente en la capital Tegucigalpa, la norteña San Pedro Sula, incluidos los satélites del Valle de Sula y los atlánticos puertos de Tela y La Ceiba, indicaron expertos consultados.
Sus operaciones más potentes se ligan a la extorsión y al narcomenudeo, pero ellos también cometen un amplio y variado catálogo de crímenes.
Para el director de la Agencia Técnica de Investigación (ATIC), Ricardo Castro, la lucha contra las pandillas a nivel institucional es constante. “Esa lucha la hemos empezado desde que fue creada la agencia y se han visto los resultados en las operaciones que se han hecho contra las pandillas, porque realmente están causando demasiada muerte y están causando que muchos jóvenes menores estén entrando en el mundo de las drogas y es algo que no podemos permitir”.
Respecto al plan estadounidense para hacer frente a las acciones de la MS-13 en ese país, Castro dijo que “debemos seguir trabajando, lógicamente si deportan gente nosotros estamos aquí para esperarlos y enjuiciarlos porque no podemos permitir que la niñez se siga perdiendo, no podemos permitir que se siga asesinando personas y que queden en la impunidad, y más para nosotros que estamos involucrados en la investigación”.
Debido a la impunidad que ha cubierto a las pandillas el director de la ATIC manifestó que “recordemos que ellos vivieron en un tiempo de impunidad y bajo el manto que algunos fueron protegidos hasta por la policía y ahora la situación ha cambiado, puede ser que estas personas aparezcan sin antecedentes acá, pero tenemos que hacer las investigaciones del caso”.
Sobre las líneas concretas de trabajo para contrarrestar a las pandillas, Ricardo Castro no quiso detallar las mismas ya que a su juicio es sobreavisar a los criminales. “Los planes difícilmente los vamos a dar a conocer porque es darle armas al enemigo y a eso están acostumbrados, se fugan y por eso no se encuentra nada”.
Más adelante externó que el Plan estratégico del MP hasta 2020, “contempla todo tipo de acciones contra las maras y pandillas”.
Alcalde de Talanga y exjefe policial capturados en Operación Avalancha.
AntecedentesLos principales golpes que Honduras ha asestado a las pandillas corresponden a la Operación Avalancha en sus fases I y II, mismas que lograron tumbar gran parte de los caudales financieros de la pandilla MS- 13, además de capturar a líderes de la organización, incluidos al menos un oficial de policía y un alcalde. En febrero de 2016, cuando se ejecutó la Operación Avalancha I, el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado, junto al fiscal Chinchilla comparecieron públicamente y en ese escenario el mandatario pidió a los extorsionadores que se entreguen a la justicia y que «puede haber algunas consideraciones si delatan a los demás».
El gobernante hondureño llegó entonces a la sede del Ministerio Público en Tegucigalpa, y habló sobre el operativo contra la estructura MS-13. En octubre pasado, cuando se verificó la Operación Avalancha II, el embajador de Estados Unidos acreditado en Tegucigalpa, James Nealon, alabó esas acciones, encaminadas a privar de sus bienes a miembros de la pandilla MS-13 en todo el país. El diplomático norteamericano posteó en su cuenta de Twitter: “Operación Avalancha II muestra una vez más que Honduras no tolerará aquellos que se benefician de las actividades criminales”.
El Ministerio Público, con el apoyo de otros operadores de justicia, realizó entonces al menos 60 allanamientos en siete departamentos del país y logró con esa acción, asegurar unos mil 559 bienes de miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13). En febrero de 2016 inició la Operación Avalancha con el aseguramiento de 102 bienes a nombre de presuntos extorsionadores. Fue considerado el primer golpe de este tipo a estructuras de maras y pandillas. |
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