“CEJIL expresa su preocupación ante la posibilidad de que el asesinato de los ambientalistas quede en la impunidad. Con la condena de los policías, el Estado de Honduras estaba dando muestras de que la justicia local sí puede ser eficiente y diligente”, dijo el organismo en un comunicado.
“Es prioritario que el Estado ahora investigue si la fuga contó con la complicidad de los autores intelectuales del asesinato de los ecologistas o de otras personas involucradas, lo que evidenciaría la existencia de estructuras clandestinas que socavan la justicia y fortalecen la impunidad”, indicó.
Informó de que por la fuga de los policías, CEJIL y MAO se vieron obligados a solicitar a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) medidas cautelares para los familiares de los ecologistas asesinados a fin de garantizar su seguridad e integridad.
El organismo apunta que inicialmente escaparon Juan José Talavera y Milton Omar Cáceres Rodríguez, y días después José Arcadio Gonzáles., sin que “hasta el momento las autoridades estatales no han brindado ninguna explicación de lo ocurrido”.
Los hombres se fugaron de las instalaciones del 115 Batallón de Infantería Militar con sede en Juticalpa, Olancho.
Los policías fueron sentenciados el pasado 1 de julio por el Tribunal de Sentencia del Departamento de Olancho y la individualización de la pena se realizaría el próximo 15 de agosto.
CEJIL exhortó al Estado de Honduras a tomar todas las medidas necesarias para recapturar a los policías y sancionarles como corresponda y señaló que esta es la única forma de devolver a la sociedad hondureña y a la comunidad internacional la confianza en las instituciones estatales.
El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Honduras (COFADEH) también expresó su preocupación ante la posibilidad de que los fugados intenten acciones contra los familiares de los ecologistas y los testigos del caso.