En la misiva Zelaya dijo que “No vamos a rendir nuestras banderas de lucha” en un claro llamado a que los docentes continúen fuera de las aulas y tomándose las principales arterias viales de la capital y del país.
A pesar que durante su gestión presidencial Zelaya ordenó a las fuerzas policiales que desalojaran a los maestros en la capital, como el 2007, y los demás años de su gestión, ahora proclama que a “ los maestros les consta que cuando llegaban a Tegucigalpa, personalmente salía a las calles a atenderlos” .
Pero el ex mandatario llegaba a recibirlos cuando los dirigentes magisteriales se plegaron a su proyecto de la Cuarta Urna y las manifestaciones eran para que se desobedeciera la orden de la justicia anulando la llamada consulta que buscaba convocar a la asamblea constituyente para que la misma reformara la Constitución y perpetuará a Zelaya en el poder.
En referencia a las fuerzas policiales y al gobierno del presidente Porfirio Lobo Sosa, en su carta, enviada desde República Dominicana, a través de un moderno BlackBerry, Zelaya las califica como “esas bestias tienen que pagar lo que le hacen al pueblo”.
A pesar que la misma dirigencia magisterial y ex funcionarios de su administración en el Inprema admitieron que se sacaron 4,000 millones de lempiras para trasladarlos al gobierno que dirigía Zelaya, en la carta el ex mandatario afirma que “es falso que en nuestro periodo se sustrajeran fondos del Instituto de Pensiones del Magisterio”.
La razón que arguyen los colegios magisteriales para dejar sin clases a más de un millón de alumnos es que el gobierno debe pagar los 4,000 millones de lempiras que el Inprema transfirió al gobierno por orden de Zelaya.
