Reyes explicó que la propuesta era “una alternativa que permitía a los campesinos encontrarle una solución definitiva al conflicto que siempre se ha dado en la zona del Aguán, era una propuesta basada en un convenio de co inversión que permite a los campesinos, además de tener acceso a la tierra, entrar a un sistema productivo que permita abastecer a las plantas procesadoras, era un sistema ganar- ganar”.
“Creíamos que era una propuesta bastante atractiva para el movimiento campesino, siempre y cuando el principio de esta lucha era el acceso a la tierra, la propuesta les daba acceso a esa tierra, la propuesta era que cada familia dentro de cada grupo campesino pudiera tener una hectárea de palma africana en producción y además quedarse con una hectárea adicional por familia que les permitiera tener una nueva plantación y tener contratos de co inversión con las plantas procesadoras que les permitiera colocar esa fruta”, agregó.
La propuesta, comentó, incluía algunos puntos que surgieron del mismo en el proceso de diálogo que se realizó con los grupos campesinos.
“Estábamos, no solo resolviendo el problema de darle tierra a los campesinos, sino también introduciéndolos a una cadena productiva.
Lamentablemente no hemos tenido respuesta de parte de ellos”, apuntó.
Reyes llamó a los campesinos “que de forma tranquila, ordenada, de forma pacífica procedan a desalojar las plantaciones que han sido tomadas.
El conflicto agrario en el Bajo Aguán ha dejado más de 20 muertos y miles de hectáreas de palma africana destruidas.