spot_img

Bella procesión del Santo Entierro en Tegucigalpa demuestra prendida fe católica

Por:

Compartir esta noticia:

Tegucigalpa – En el preciso momento que comenzaba a caer la soleada tarde en Tegucigalpa, una imponente y concurrida procesión del Santo Entierro mostraba que la fe católica se mantiene viva entre los capitalinos.
 

– Simultáneas procesiones en las ciudades gemelas de Tegucigalpa y Comayagüela, reafirman que el sentimiento religioso se mantiene intacto.

– La jornada comenzó a primeras horas cuando se realizó el viacrucis, en el que miles de feligreses abarrotaron el centro de la capital hondureña.

El Santo Entierro, es una tradición católica que recuerda el cuerpo lacerado de Jesús, quien al ser bajado de la cruz ya no siente más el sufrimiento humano. Luego es envuelto en una manta, colocado en una urna y llevado a su última morada.

La procesión culminante de este Viernes Santo dio paso a una veintena de imágenes, encabezadas por la del apóstol Pedro, posteriormente José de Arimatea, Nicodemo, imágenes de ángeles con las siete palabras de Jesús antes de morir y el Cristo de la Misericordia.

Luego salieron a escena Los Caballeros del Santo Entierro, quienes recuerdan la fe de Pedro, cargando el cuerpo de Cristo en una tarima imponente y vigorizada.

El Santo Entierro consistió en el recorrido de decenas de cuadras, iniciando en la Iglesia La Catedral, pasando por la majestuosa alfombra de aserrín de 600 metros.

No podían faltar las siete palabras que cargaban los ángeles: Todo está consumado madre; He aquí a tu madre; He aquí a tu hijo; Perdónalos porque no saben lo que hacen; Dios mío, Dios mío porque me has desamparado; En verdad os digo que hoy estarás con migo en el paraíso y Fe tengo.

Bajo una mezcla de tradiciones, arte colorido, fe y esperanzas, el pueblo capitalino dramatizó el Santo Entierro del Señor Jesús y de esa manera renovó sus votos en los actos litúrgicos del Viernes Santo.

Más discreta en Comayagüela

La procesión del Santo Entierro organizada por la Iglesia Inmaculada Concepción de Comayagüela no tuvo tanto afluencia de personas, sin embargo estuvo emotiva y con momentos de profundo fervor religioso.

Desde las 5:30 de la tarde del Viernes Santo partió de la propia Iglesia Inmaculada Concepción la procesión que se alargó hasta horas de la medianoche. Esta vez, la caravana era menor, apenas los tres ángeles y la urna mayor engrosaban el evento litúrgico que tradicionalmente se organiza en la legendaria de Comayagüela.

Los Caballeros del Santo Entierro hicieron gala de sincronía y pasaron por bellas alfombras de aserrín elaboradas en la víspera para el culminante momento del desfile de la gran urna que en su interior dramatizaba llevar el cuerpo de Jesucristo.

Un momento curioso fue cuando la procesión organizada por la Iglesia Inmaculada Concepción tropezó con sus homólogos de El Calvario, quienes también conmemoran la muerte de Jesús por las calles de Comayagüela.

Cabe mencionar que en varias ciudades del país se dramatizó el Santo Entierro, con la esperanza que Jesús reviva en los corazones del pueblo hondureño.

Viacrucis hace llamado a no dar de beber
vinagre de impunidad

Centenares de feligreses capitalinos formaron parte del tradicional viacrucis que la Iglesia Católica conmemoró el Viernes Santo, ocasión que aprovechó el obispo auxiliar, Juan José Pineda, para hacer un llamado a las autoridades locales para que no le den de beber el vinagre de la impunidad a los hondureños.

El evento religioso arrancó desde la Iglesia San Francisco, y recorrió las principales avenidas de Tegucigalpa, donde los feligreses colocaron las 15 estaciones para culminar en la Iglesia El Calvario de Comayagüela.

En cada estación, el representante de la Iglesia Católica llamó a las autoridades gubernamentales y a los hondureños en general a pedir perdón por diversas faltas y a dejar a un lado las muertes violentas, así como la impunidad que caracteriza a este país centroamericano.

En la estación donde Jesucristo cayó con la cruz en sus hombros, el líder religioso señaló que en diversas ocasiones los hondureños sienten el peso de la cruz, el cual los hace caer y que encuentran a quien les de de beber «el vinagre de la impunidad y la injusticia», haciendo referencia a los índices de muertes violentas que se registran en el país, pero que los mismos continúan sin ser judicializados.

spot_img
spot_img

Lo + Nuevo

spot_img
spot_img
spot_img
spot_imgspot_img