La Habana – Las autoridades cubanas liberaron en la noche de ayer, domingo, a las más de 70 integrantes de las Damas de Blanco que fueron detenidas horas antes, entre ellas su portavoz, Berta Soler, informaron hoy a Efe fuentes de este grupo disidente.
Decenas de integrantes de las Damas de Blanco fueron objeto a lo largo del fin de semana de arrestos temporales que comenzaron el sábado, cuando el grupo intentó efectuar una marcha pacífica para conmemorar el noveno aniversario de la oleada represiva contra 75 opositores condenados durante la «Primavera Negra» de 2003.
También ayer se produjeron detenciones cuando las damas acudieron a la habanera iglesia de Santa Rita, como hacen todos los domingos para escuchar misa, y después realizar una caminata por la calle en defensa de los derechos humanos y abogar por la libertad de los presos políticos.
Estos arrestos se han producido a una semana de la visita que efectuará el Papa Benedicto XVI a la isla.
Tras su liberación, la portavoz de las Damas de Blanco, Berta Soler, dijo hoy a corresponsales en la sede habanera del grupo que la represión contra estas mujeres se está «recrudeciendo» con motivo de la visita papal porque el Gobierno cubano pretende dar al Pontífice otra imagen del país.
Según Berta Soler, con estas detenciones y hostigamientos el Gobierno cubano quiere impedir a las Damas de Blanco que acudan a las misas que ofrecerá el Papa en Cuba y así se lo ha advertido la seguridad del Estado a algunas de sus integrantes.
«Vamos a tratar de ir cueste lo que cueste», aseguró la portavoz de las Damas de Blanco, quien han reclamado que Benedicto XVI les conceda «un minuto» durante su visita a la isla, del 26 al 28 de marzo.
«Somos el sector marginado, somos el sector que sufrimos, somos el sector oprimido y quisiéramos que el Santo Padre nos escuchara un minuto» para decirle que en Cuba «existen presos políticos y que no hay respeto a los derechos humanos», dijo Berta Soler.
Sobre su detención y la de otras damas de blanco este pasado fin de semana, la activista denunció «brutalidad» policial, como tirones de pelo o el uso de fuerza contra algunas de las mujeres.
Berta Soler también se quejó del «silencio» de la jerarquía católica contra este aumento de la represión contra las Damas de Blanco. «Y ese silencio es como una negativa a ampararnos», añadió.
Por su parte, Elizardo Sánchez, portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), calificó la ola de detenciones de los últimos días como «muy negativa y desfavorable» y calculó que al menos se han producido un centenar de arrestos entre los de las Damas y otros opositores.
En declaraciones a Efe, Sánchez dijo que es el propio Gobierno cubano el que está «enrareciendo» la atmósfera política y social con medidas de represión política «exageradas».
«La presencia policial se ha multiplicado, están pidiendo documentación en la calle, hay hostigamiento a los vendedores, es decir, a cualquiera persona que funcione fuera de la tutela del Estado», añadió.
Las Damas de Blanco han insistido en denunciar que se ha producido en las últimas semanas «un agravamiento» de la represión contra la disidencia interna y especial contra ellas.
En particular han denunciado acciones de hostigamiento, arrestos temporales, maltrato, actos de repudio, advertencias y amenazas de la policía política en La Habana, y también en otras provincias como Pinar del Río, en la ciudad central de Santa Clara y en las orientales Holguín y Santiago de Cuba.
La semana pasada tuvo lugar otro polémico episodio con la disidencia interna cuando un grupo de opositores ocupó un templo católico de La Habana durante dos días y finalmente fueron desalojados por la policía a petición de las autoridades de la iglesia cubana.
También ayer se produjeron detenciones cuando las damas acudieron a la habanera iglesia de Santa Rita, como hacen todos los domingos para escuchar misa, y después realizar una caminata por la calle en defensa de los derechos humanos y abogar por la libertad de los presos políticos.
Estos arrestos se han producido a una semana de la visita que efectuará el Papa Benedicto XVI a la isla.
Tras su liberación, la portavoz de las Damas de Blanco, Berta Soler, dijo hoy a corresponsales en la sede habanera del grupo que la represión contra estas mujeres se está «recrudeciendo» con motivo de la visita papal porque el Gobierno cubano pretende dar al Pontífice otra imagen del país.
Según Berta Soler, con estas detenciones y hostigamientos el Gobierno cubano quiere impedir a las Damas de Blanco que acudan a las misas que ofrecerá el Papa en Cuba y así se lo ha advertido la seguridad del Estado a algunas de sus integrantes.
«Vamos a tratar de ir cueste lo que cueste», aseguró la portavoz de las Damas de Blanco, quien han reclamado que Benedicto XVI les conceda «un minuto» durante su visita a la isla, del 26 al 28 de marzo.
«Somos el sector marginado, somos el sector que sufrimos, somos el sector oprimido y quisiéramos que el Santo Padre nos escuchara un minuto» para decirle que en Cuba «existen presos políticos y que no hay respeto a los derechos humanos», dijo Berta Soler.
Sobre su detención y la de otras damas de blanco este pasado fin de semana, la activista denunció «brutalidad» policial, como tirones de pelo o el uso de fuerza contra algunas de las mujeres.
Berta Soler también se quejó del «silencio» de la jerarquía católica contra este aumento de la represión contra las Damas de Blanco. «Y ese silencio es como una negativa a ampararnos», añadió.
Por su parte, Elizardo Sánchez, portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), calificó la ola de detenciones de los últimos días como «muy negativa y desfavorable» y calculó que al menos se han producido un centenar de arrestos entre los de las Damas y otros opositores.
En declaraciones a Efe, Sánchez dijo que es el propio Gobierno cubano el que está «enrareciendo» la atmósfera política y social con medidas de represión política «exageradas».
«La presencia policial se ha multiplicado, están pidiendo documentación en la calle, hay hostigamiento a los vendedores, es decir, a cualquiera persona que funcione fuera de la tutela del Estado», añadió.
Las Damas de Blanco han insistido en denunciar que se ha producido en las últimas semanas «un agravamiento» de la represión contra la disidencia interna y especial contra ellas.
En particular han denunciado acciones de hostigamiento, arrestos temporales, maltrato, actos de repudio, advertencias y amenazas de la policía política en La Habana, y también en otras provincias como Pinar del Río, en la ciudad central de Santa Clara y en las orientales Holguín y Santiago de Cuba.
La semana pasada tuvo lugar otro polémico episodio con la disidencia interna cuando un grupo de opositores ocupó un templo católico de La Habana durante dos días y finalmente fueron desalojados por la policía a petición de las autoridades de la iglesia cubana.
