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ASJ alerta que el poder se está usando para destruir, no para construir democracia

Tegucigalpa- El Director Ejecutivo de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Carlos Hernández, refiriéndose a un reciente informe del Observatorio para la Democracia reitero que se denunció el uso de recursos públicos para ejecutar una campaña de desprestigio contra el Consejo Nacional Electoral (CNE), lo que calificó como un atentado grave contra la democracia hondureña.

Lamentablemente, el poder en este país no se ha utilizado para beneficiar al pueblo, sino para favorecer intereses políticos particulares. Desde el Observatorio por la Democracia detectamos una campaña brutal -financiada con fondos públicos- contra el organismo electoral. Solo en dos redes sociales monitoreadas, estos ataques aparecieron más de 77 millones de veces en las pantallas de los hondureños, advirtió Hernández.

Según el dirigente de sociedad civil, esa estrategia sistemática de desinformación y ataque responde a una intención premeditada de generar incertidumbre, debilitar al CNE y afectar la legitimidad del proceso electoral en marcha. «Ya se volvió normal usar helicópteros, medios oficiales y el canal del Estado para hacer campaña, pero usar dinero del pueblo para destruir la credibilidad del árbitro electoral es gravísimo», agregó.

Hernández también alertó sobre señales preocupantes desde el seno del propio Consejo Electoral. «Hay titulares y comportamientos dentro del CNE que parecen ir en la línea de desaparecer a partidos minoritarios, olvidando que en democracia todas las voces cuentan. Las minorías también importan», expresó.

Destacó el papel de las dos consejeras del CNE y pidió que el organismo actúe con respeto a la ley, a la dignidad humana y con unidad. Hay actitudes que ni parecen de personas con educación. El ejemplo que damos al mundo es lamentable; en otros países se ríen al ver cómo aquí funcionarios públicos usan su tiempo laboral para atacar instituciones, lamentó.

Al ser consultado sobre si las elecciones generales del 30 de noviembre están en riesgo, Hernández fue claro: «Hay condiciones, pero también hay sectores que quieren debilitar el proceso. No podemos quedarnos de brazos cruzados.»

Finalmente, hizo un llamado a toda la ciudadanía y a los sectores organizados del país a asumir su rol con responsabilidad. «Este país no es de los políticos, es de todos. Las Iglesias, universidades, sociedad civil y todos los hondureños debemos defender la democracia. Si es necesario, saldremos a las calles a exigir elecciones libres, limpias y transparentes», concluyó.LB

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