El informe cita el caso del edecán presidencial como uno de los asesinatos y violaciones a los derechos humanos que ha quedado en la impunidad en Honduras, aunque menciona%26nbsp; que al final del año pasado, el gobierno informó la detención de dos sospechosos Edwin Ernesto Hernández y Hansen Mohamed Handal.
El capitán Motiño Zavala, ayudante personal y hombre de confianza del presidente Manuel Zelaya Rosales, fue asesinado por sicarios el 22 de junio del año pasado cuando salía de su vivienda en la colonia Villa Olímpica de la capital.
En ese entonces, el presidente y varios de sus funcionarios afirmaron que «sectores de poder» llevaron a cabo un asesinato político en contra de la nación.
No obstante, el Departamento de Estado, señala que los grupos de derechos humanos comentaron que no había pruebas para apoyar la afirmación del gobernante y “al final del año las autoridades de seguridad habían detenido a dos sospechosos, Edwin Ernesto Hernández y Hansen Mohamed Handal”.
Esta es la primera vez que trascienden estos nombres, porque a nivel de opinión pública en Honduras nunca antes se dieron a conocer por las autoridades policiales. Se desconoce si esas personas enfrentaron un proceso judicial o si por el contrario fueron liberados por las autoridades.
¿Quiénes son?, ¿dónde están? y ¿dónde se encuentran detenidas esas personas?, son preguntas que solo pueden responder los órganos de investigación y de la policía preventiva hondureña.
El portavoz de la policía, Héctor Iván Mejía, dijo hoy que el informe solo recoge una opinión no oficial y señaló que desconoce que estas personas hayan sido detenidas. «Esa información no la tengo y no la doy por cierta», apuntó.
Mejía se abstuvo dar mayores detalles sobre las investigaciones del caso, aduciendo que las indagaciones se manejan en secretividad y que sólo es conocida por las autoridades pertinentes y la propia familia del occiso.
