Tegucigalpa– Un equipo forense se trasladó en las últimas horas hasta la calle que conecta el anillo periférico con el aeropuerto internacional Toncontín, donde los policías preventivos ya resguardaban la escena donde yacía un cuerpo de un hombre acribillado.
La víctima fue identificada como Carlos Samuel Arteaga Raudales de 32 años quien de acuerdo con la información que maneja la Policía, fue raptado de su vivienda cuando ya dormía ya que fue encontrado en ropa interior y horas después fue encontrado asesinado a balazos.
La víctima era conductor de buses rapiditos de la ruta Cerro Grande-Kennedy, los asesinos le dejaron un rótulo donde se lee: “Por meterse con la mujer equivocada”.
Mientras que el sector conocido como Rancho El Coco en San Pedro Sula, norte de Honduras, fue encontrado asesinado un joven entre 17 y 20 años.
Las autoridades informaron que sobre el pecho del joven, los sicarios dejaron un rótulo donde se lee: “Por sapo”, indicó el subinspector Reyes de la Policía Nacional quien indicó que a simple vista no se aprecian heridas de bala o de arma blanca.
En ese sentido, será Medicina Forense que luego de una autopsia determinará las causas del deceso del joven que al parecer fue lanzado desde un vehículo.
El oficial recordó que hace unos días también fue encontrado el cuerpo de una persona asesinada en similares circunstancias en ese mismo sector que es bastante transitado.
Al momento del levantamiento del cuerpo, los peritos forenses comprobaron que a la víctima le cortaron la lengua la que dejaron el interior de una bolsita.
Asimismo, al joven se le encontró una partida de nacimiento a nombre Ramón Antonio Martínez Zúniga de 17 años y una contraseña, de los que se colige que ya había tramitado su cédula de identidad ante el Registro Nacional de las Personas (RNP).
