Los arrestos forman parte de la Operación Escudo, realizada conjuntamente por agencias del orden a nivel estatal y local contra las pandillas, informó la agencia federal en un comunicado de prensa.
De los 102 arrestados, 26 son ciudadanos estadounidenses y 76 son extranjeros -58 de ellos son mexicanos y el resto proveniente de Guatemala y Honduras-.
El estatus migratorio de los extranjeros no fue detallado.
Veintinueve de los detenidos enfrentan cargos criminales relacionados con leyes estatales en contra de las pandillas y tres enfrentan cargos por reingresar de manera ilegal a Estados Unidos después de ser deportados, una violación que puede ser castigada con una pena máxima de 20 años de prisión.
«La actividad de pandillas representa una de las grandes amenazas a la seguridad pública de Arizona», dijo Matt Allen, agente especial a cargo de la Oficina de ICE, en el mismo comunicado.