Una serie de tarifazos, como al de las llamadas a Hondutel y la entrante internacional de tres centavos de dólar, así como se confirma el incremento a la tarifa del 11 por ciento a la energía eléctrica de parte de la ENEE , además de miles de millones de lempiras extras incluye el presupuesto general que el gobierno de Manuel Zelaya junto al Congreso Nacional de Roberto Micheletti aprobaron anoche.
El presupuesto contempla una partida discrecional de 5,000 millones de lempiras que será utilizada por el gobierno.
Pese a la posición del resto de las bancadas representadas en el parlamento hondureño el Presupuesto General de la República fue aprobado sin objeciones y con él un impuesto a la telefonía internacional que afectará especialmente a los hondureños que habitan en Estados Unidos; incrementos sin control a las tarifas de la energía eléctrica y medidas que conllevan pagos por transacciones bancarias conforman el nuevo paquetazo que de forma subliminal ya ha comenzado a afectar a los hondureños.
El presupuesto aprobado es de 101, 850 millones de lempiras y contempla, por exigencia de la oposición, un límite de endeudamiento que no deberá ser superior al 23 por ciento del PIB para el ejercicio del presente año.
De acuerdo a lo aprobado en torno al presupuesto 2008, el endeudamiento interno no deberá superar los cinco mil millones de lempiras. Según expertos oficiales esta medida indica que el endeudamiento neto que se podría alcanzar es de 450 millones de dólares.
Del total del presupuesto aprobado el gobierno central cuanta con una asignación de 61,066 millones de lempiras, el resto va dirigido a los entes descentralizados.
La estatal Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEEE) registra una asignación superior a los 17,000 millones de lempiras.
Se contempla además que el déficit fiscal del presupuesto para el ejercicio 2008 no será superior al 1.8 por ciento en lo que respecta al gobierno central.
En lo relativo a ingresos el presupuesto contempla cerca de siete mil millones de lempiras que provendrían de Petrocaribe. Los congresistas han propuesto que estos fondos no sean destinados a ningún rubro hasta que en la Cámara Legislativa se apruebe una ley especial para su regulación.