Tegucigalpa – A criterio del director ejecutivo del Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria (NIMD), Héctor Soto, América Latina “es un péndulo ideológico” donde se pasa de derecha a izquierda y viceversa.
– No tenemos una democracia perfecta, pero sí capacidad que un gobierno le entregue a otro como ha ocurrido en los últimos años.
– Las elecciones primarias es un buen ejercicio para conocer los desafíos que enfrentaremos en las generales.
Dijo que históricamente los procesos electorales hondureños han estado marcados por incertidumbre, temores y sensaciones de miedo, pero afortunadamente la última elección con sus desafíos efectivamente funciona para asegurar el tránsito del poder.
Cuestionó que los partidos políticos hayan excluido la meritocracia para acceder a los cargos primando la pertenencia partidaria y eso quedó demostrados con los nombramientos en la Corte Suprema de Justicia, Tribunal de Cuentas, Consejo Electoral, Registro de las Personas, Unidad de Política Limpia, entre otros entes.
Soto esbozó que “lo que vemos es la participación de los tres partidos a lo largo de todo el espinazo o la columna vertebral del CNE. No se puede creer que un partido desplaza a otro, lo que vemos es como el tripartidismo ha logrado copar estas instituciones democráticas”.
Valoró como ideas interesantes el voto electrónico y un modernos sistema de transmisión de datos, al tiempo que abogó por las audiencias abiertas de los consejeros del órgano electoral, especialmente las discusiones que son complejas para transparentar el proceso.
Enfatizó que para desmontar la idea de un posible fraude electoral es vitar la publicidad de las acciones que se tomen en el CNE.
El titular del Instituto Holandés, mencionó que no importa si un gobierno -de izquierda o derecha- accede al poder de forma democrática y cuya gestión refleja el sentimiento de la mayoría de la población. “América Latina es un péndulo ideológico, y lo podemos ver en países como Brasil o Argentina y Honduras que han transitado de la izquierda a la derecha, eso se está volviendo habitual en la región, pero lo que no se puede volver habitual son las prácticas autoritarias”, indicó.
Apoyó la participación de la sociedad civil en las mesas electorales, y a la toma de decisiones que no se hagan al límite de situaciones que podrían generar desconfianza en el electorado.
Puntualizó que las observaciones internacionales, ya sean de un lado y otro, son saludables para la democracia y más cuando se concluye que hubo transparencia en los comicios electorales. JS
