Tegucigalpa (Especial Proceso Digital / Por Jorge Sierra) – “Un llamado para que nadie que tiene el derecho y el deber de ir a votar deje de ejercer el sufragio por el bien de Honduras y de la democracia, para que luego podamos exigir a los elegidos el cumplimiento de sus promesas y el cumplimiento de una buena política para el bien de todo el país”, comenzó diciendo el presidente de la Conferencia Episcopal de Honduras (CEH), Ángel Garachana Pérez en conversación con Proceso Digital.
– En la semana que faltan para las elecciones, pidió a los actores políticos que contribuyan a un ambiente de paz y masiva participación el día 28 de noviembre.
– No elegir a los candidatos manchados por corrupción, narcotráfico o comportamiento alejado de la ética, pidió Garachana que luego acentuó: “hondureños saquemos lo mejor de nosotros mismos el próximo domingo cuando acudamos en las urnas”.
-“Tenemos una oportunidad de cambio y transformación para Honduras”, dijo.
El obispo Garachana, oriundo de Burgos, España, cuenta con 49 años de vida sacerdotal, 30 de esos en Honduras, un país del que ha hecho su hogar y en el que su amor por esa nación le ha sido ampliamente correspondido más allá de su feligresía. El asegura que sus restos serán enterrados en este país, donde actualmente funge como presidente de la Conferencia Episcopal de y es obispo de la diócesis de San Pedro Sula.
Comenzó diciendo que las elecciones del próximo domingo representan “un momento cualificado para Honduras”.
Mencionó que el país atraviesa una serie de crisis que se han vuelto crónicas. “Hemos llegado al tope. Tenemos una crisis social, política, económica y me atrevería decir una crisis religiosa porque todo lo anterior afecta la vivencia religiosa”, esbozó.
Sin embargo, el obispo Garachana apuntó que los momentos de crisis plantean dos escenarios: hundirse como nación o levantarse mediante una transformación. “El momento actual es una oportunidad de cambio, un momento de transformación de Honduras, pero dependemos de las actitudes personales y colectivas”, indicó.
Explicó que las actitudes personales tienen que ver con las de los candidatos y saber qué nos ofrecen y, por qué quieren llegar a ostentar cargos. En tanto, las actitudes colectivas tienen que ver con los distintos sectores de la sociedad para reclamar los cambios.
“El que resulte ganador que no diga: ‘he vencido’ porque ha ganado las elecciones, pero es para servir al pueblo que fue electo, de una manera conjunta con todas las instituciones. Si no sucede así, entonces la crisis continuará cada vez más radical, lo que derivará en más perjuicio para Honduras”, alertó el sacerdote de 77 años.
Campaña política es género literario
A criterio del obispo de San Pedro Sula, la actual campaña política es muy parecida a la de otros años. “En general las campañas políticas hoy en día no suelen tener altura, en el sentido de propuestas, son más bien un estilo de propagandas, de promesas, pero vacías”, ahondó.
Garachana Pérez comparó las campañas electorales con los géneros literarios porque tienden a exagerar.
Apeló respeto y altura ciudadana de los políticos para transmitir su propuesta electoral.
“Ha existido un lenguaje muy agresivo y violento, tanto que ha sido una gran preocupación porque ese tono de violencia se ha trasladado a la realidad”, resumió.
No estamos en guerra para firmar la paz
El presidente de los obispos hondureños, dijo que aunque se firme un acuerdo de paz de cara a los comicios del próximo 28 de noviembre, existen antecedentes para creer que fácilmente será roto.
“La experiencia nos dice que compromisos más sagrados se han roto con mucha más facilidad, entonces no me parece mal que lo firmen, pero debe ser más un compromiso, aunque no debería ser necesario porque no estamos en guerra para firmar la paz. La democracia no es una guerra, se trata de una participación ciudadana en la que expresamos nuestra manera de ver las cosas o la forma de elección de nuestros representantes populares, es un diálogo, es una propuesta, es escuchar lo que dice uno y otro”, delineó.
Reflexionó que si llega a firmarse este acuerdo de paz entre los actores políticos, “que de verdad sea de corazón y que se demuestre inmediatamente que cambian las actitudes, el lenguaje, el estilo de los mensajes y que desaparezcan los ataques. Si se firma y seguimos igual sería un descrédito para los que lo han firmado”.
Urgió que los actores políticos del más alto nivel deban tener una decidida convicción y un comportamiento ejemplar de todos. “En los días que quedan deben dejar de lado el lenguaje violento, agresivo y de ataques, e incluso dejar de lado completamente las acciones de los dirigentes y los seguidores en las bases para que llegue el día 28 (de noviembre) en un ambiente de armonía, convivencia y de paz”, remarcó.
Garachana Pérez recordó que en la reunión de obispos de junio de este año, así como en la de octubre, en ambas citas por unanimidad llamaron al pueblo: no a la abstención, sí a la elección que termina en depositar el voto de todos los ciudadanos en edad de votar.
Pidió no dejarse amedrentar por aquellos que quieren sembrar el caos en el país. “Manifestemos que tenemos convicciones, que somos personas coherentes y que el miedo no nos va a encerrar, al contrario vamos a ser fuertes de ánimo y por el bien de Honduras queremos votar”.
Politización del aborto y matrimonio igualitario
Consultado sobre el aborto y el matrimonio igualitario, ambos temas central de campaña en el Partido Nacional, el obispo Garachana Pérez citó que la Iglesia Católica tiene una doctrina moral en todos los aspectos de la vida, desde el comportamiento individual, familiar y ciudadano de las personas.
“Todos conocen las posturas de la iglesia con respecto a estos temas, pero ¿Dónde está el problema? pues que un partido político lo ha tomado de bandera de ataque a otro partido, y creo -es mi interpretación- que esas realidades tan sagradas y tan importantes como son la vida, el ser no nacido en el vientre materno, como lo es el matrimonio… un partido lo ha tomado como arma arrojadiza contra otro y creo que lo están utilizando más como politización que como defensa de esos verdaderos valores”, desglosó.
Subrayó que la Iglesia Católica defiende la vida en todas sus etapas, “defender al no nacido, pero también crear las condiciones para que el nacido pueda vivir con dignidad humana. La pobreza es una atentado a la vida humana, cuidar todo el ambiente donde vivimos para que la vida humana se desarrolle, los atentados contra la ecología, el contexto de violencia en el que vivimos… es decir las formas de atentado contra la vida son muchas”.
Propuso que las propuestas políticas defiendan, promuevan y cuiden la vida en todas las etapas y en todas sus manifestaciones.
Actores políticos
El líder de los obispos hondureños externó que han pedido a las máximas autoridades del Consejo Nacional Electoral (CNE), que cumplan con lo plasmado en la legislación.
Clamó que las decisiones del órgano electoral no acaben politizándose. “Cumplan con objetividad la normativa que regula sus funciones, de manera que merezcan credibilidad y que de ninguna manera se politicen partidísticamente”, ahondó.
A las Fuerzas Armadas (FFAA), les recordó que ya la ley delimita cuáles son sus funciones en torno al proceso electoral. “En general, suelo insistir en esto, Honduras tienen las instituciones, el problema es que se deforman y no cumplen con su tarea… esperamos que no haya abusos por parte de las autoridades, en resumen son instituciones que ya están delimitadas sus funciones, solo cúmplanlas por el bien de Honduras y de la democracia”.
El representante de la Iglesia Católica, envió un mensaje a los políticos: “Hay que saber ganar y hay que saber perder, el que no sabe perder no tiene madurez para gobernar y el que no sabe ganar porque se siente orgulloso tampoco sirve para gobernar”.
Caviló: “¿Para qué quieren ganar?, para tener poder político, estoy de acuerdo, pero les recuerdo que este poder es para servir al pueblo, a favor del bien común”.
Calificó de “bastardos” los intereses políticos que buscan proteger a correligionarios o intereses particulares.
A votar sin precipitación
El obispo hizo un llamado a votar con responsabilidad y sin precipitaciones en los comicios del próximo domingo.
“Apelamos por un voto que no sea comprado por unas bolsas de cemento o láminas, pedimos un voto pensado, dialogado e incluso responsable y libre. Queremos que en las mesas electorales se respete esa libertad de voto y que los observadores con sus credenciales que estén atentos para que todo transcurra con transparencia y no haya posibilidad de fraude”, externó.
Finalmente, dijo que Honduras urge una clase política que busque consensos para el bien de las mayorías. “Amenazar con no aceptar los resultados electorales a quien no le favorezca la voz del pueblo en las urnas, eso es desestabilizar el país y contribuir al contexto de violencia y rechazo entre unos y otros”.
JS