Pero el entrenador colombiano también desveló que su equipo está dividido en «tres» grupos de futbolistas, que le tratan según los ponga o no a jugar, y dijo estar «triste» por el mal papel de la selección en Sudáfrica.
Según medios hondureños, Bernárdez reclamó a Rueda en sus declaraciones que aún no le haya puesto a jugar y que contra España, que ganó por 1-0, no sacó a jugadores que, en su opinión, debían ser titulares, como Hendry Thomas o Edgar Álvarez, ambos internacionales con el Wigan inglés y el Bari italiano.
«A la guerra debes ir con los mejores hombres», expresó el jugador del Anderlecht de Bélgica, al remarcar que en la selección hondureña «hay jugadores de mucha experiencia, de roce internacional», y que habrá buenos resultados «siempre y cuando pongan los hombres que tienen que poner en la cancha».
Bernárdez dijo que su «calentura» es no haber jugado hasta ahora en Sudáfrica y que quiere «debutar» porque si no juega, «a nada» vino al Mundial.
En su comparecencia ante la prensa, Rueda sentenció sobre Bernárdez: «él es el jugador y yo soy el técnico», pero descartó cualquier eventual sanción contra él e indicó que hoy se entrenó con normalidad con el resto del grupo.
Al criticar Bernárdez que no haya alineado a ciertos jugadores añadió, «antes que a mí está faltando al respeto a sus compañeros que jugaron contra España».
Sin embargo, Rueda matizó que hoy mismo habló en privado con el jugador y que todo se resume en que «él pensaba que contra España debían ir ciertos jugadores», y que su crítica «no era ni por él» (que quisiera jugar).
Según sectores de la prensa deportiva hondureña, las diferencias internas han afectado a la selección en varios procesos clasificatorios mundialistas en los últimos años.
Rueda admitió que es posible que algunos jugadores se hayan conformado con la clasificación al Mundial y esa actitud esté afectando el rendimiento del equipo en Sudáfrica.
Reiteró también que la pérdida por lesiones de jugadores como Carlo Costly y Julio César de León ha disminuido el potencial ofensivo del equipo.
Sobre su continuidad en el cargo, consideró que el de mañana ante Suiza «podría tomarse ese juego como el de la despedida si ellos (los directivos de la Federación hondureña de fútbol) quieren».
La Federación hizo a Rueda una oferta para continuar dirigiendo a Honduras, pero ambas partes han reiterado que discutirían el asunto después del Mundial.
«en momento difícil» ante Suiza
El seleccionador de Honduras, Reinaldo Rueda, reconoció hoy que su equipo llega «en un momento difícil» al partido que jugará mañana contra Suiza en el Mundial de Sudáfrica.
Rueda destacó en conferencia de prensa que la selección suiza es «muy compacta», con «mucho orden» y una «gran combatividad», como lo demostró en el partido que ganó por 1-0 a España en la apertura del Grupo H, que se cierra mañana.
Honduras ha perdido sus dos partido, 1-0 ante Chile y 2-0 con España, a pesar de lo cual alberga remotas posibilidades de pasar a octavos de final si se da la adecuada combinación del resultado suyo con Suiza y el del partido entre chilenos y españoles.
«La tensión» del debut de Honduras frente a Chile después de no participar en un Mundial en 28 años y tras enfrentarse a una potencia como España «nos tiene en un momento difícil»; esto «duele y nos tiene tristes», subrayó Rueda.
La posibilidad matemática de Honduras de clasificarse «puede lograrse o no», pero «tenemos que hacer lo nuestro» para alcanzarlo, añadió el seleccionador, que dedicó la mayor parte de su comparecencia a preguntas de la prensa hondureña sobre críticas contra él por parte del jugador Víctor Bernárdez.
«Queremos hacer algo mejor y todavía no lo hemos podido lograr», dijo el técnico de Honduras, y reiteró que el encuentro ante Suiza «es el partido de la dignidad, del decoro».
La selección hondureña, al igual que la suiza, se entrenó en un estadio universitario de Bloemfontein ante la decisión de la FIFA de no hacerlo en el Free State para proteger el césped, afectado por el frío.
