Se trata de Meshael Alayban, una princesa saudí de 42 años, detenida por tráfico humano tras retener a una trabajadora doméstica en contra de su voluntad en un condominio que se localiza en el Condado Orange.
La empleada doméstica originaria de Kenia logró abordar un autobús en el sur de California, Estados Unidos y luego le contó a uno de los pasajeros de la unidad que estuvo retenida en contra de su voluntad, por lo que creía que fue víctima de trata de personas. Sólo horas después, una princesa saudita estaba bajo arresto.
El informe policial establece que la mujer de 30 años de edad fue contratada a través de una agencia en Kenia en marzo de 2012 y una vez en Arabia Saudita le retiraron el pasaporte.
La empleada doméstica relató que cuando fue contratada le ofrecieron un salario de mil 600 dólares al mes por una jornada laboral de ocho horas diarias, cinco días a la semana. Sin embargo la realidad fue distinta, ya que la obligaban a hacer turnos de 16 horas los siete días a la semana, con un salario de tan solo 200 dólares.
Cabe señalar que si la princesa llega a ser condenada, enfrentará hasta 12 años en prisión.
Según el fiscal Tony Rackauckas, las leyes de los Estados Unidos y California «no toleran a quienes privan o violan la libertad de otro y la prestación de trabajos forzados».