spot_img

¿A qué va “Mel” a sus viajes presidenciales?

Tegucigalpa – Los viajes presidenciales desde finales del siglo pasado se convirtieron en la principal herramienta de la diplomacia de los países, así como en los principales impulsores de los negocios que determinado país quiere impulsar.
 

* En su viaje a Washington, sostendrá encuentros con la comunidad financiera en apenas un día.

* Los equipos técnicos del gobierno y FMI no han concluido las negociaciones previas, las cuales se encuentran estancadas
%26nbsp;
Es aceptado que el presidente se involucre directamente en los temas que antes eran de exclusividad ministerial, ya sea interviniendo vía telefónica o bien con los desplazamientos.

Lo que empieza a conocerse como diplomacia viajera la encarna en la actualidad el presidente francés Nicolás Sarkozy, quien ha viajado a China, India y el Medio Oriente a fin de impulsar la influencia de su país en el escenario internacional, pero también para promover a sus empresas de telecomunicaciones, energía nuclear, petroleras, aviación y transporte ferroviario, donde son líderes, y ello resultó en contratos por decenas de miles de millones de euros, garantizando con ello miles de empleos nuevos.

El presidente Manuel Zelaya ha tenido una política de viajes permanentes desde que comenzó su mandato, pero hasta el momento se han visto escasos resultados de sus periplos, la mayoría improductivos e incluso que no debieron ser realizados.

Hoy miércoles viajó a Washington para participar el jueves, junto a otros 2,000 invitados, en la tradicional y anual Jornada de Oración que es un desayuno que cuenta con la participación del titular de la Casa Blanca , en la actualidad George Bush.

Encuentros protocolarios

La agenda presidencial incluye reuniones con los titulares de la comunidad financiera basada en Washington: Banco Mundial, Roberto Zoellick, Interamericano de Desarrollo (BID), Lis Alberto Moreno, Henry Paulson, secretario del Tesoro estadounidense y el subdirector del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Concluirá con una entrevista con John Dimitri Negroponte, subsecretario de Estado, para los temas políticos.

Para un Presidente reunirse en un solo día con todas las figuras demuestra que será recibido en forma protocolar y que no hay tiempo para abordar temas de importancia referentes a las situaciones financieras.

Habría necesitado que su equipo preparará un plan de trabajo que le permitiera sacar provecho de sus encuentros en Washington y no sólo ser recibido e intercambiar impresiones generales.

Honduras tiene problemas en materia energética, telecomunicaciones, moneda y fiscales que necesitan la asistencia de dichos organismos, pero para ello necesita que el gobierno defina hacia donde quiere ir y que recursos cuenta para ello.

Pero malgastar el tiempo no es bueno para las actividades presidenciales.

Los encuentros se realizarán cuando el equipo técnico encabezado por la ministra de Finanzas, Rebeca Santos, y el titular del Banco Central, Edwin Araque, no han concluido sus negociaciones con sus pares del Fondo.

El mandatario hondureño sólo debía reunirse con la comunidad financiera para destrabar los temas que su equipo técnico no podía y para ello utilizar la figura presidencial que en todos lados es recibida.

Europa

Zelaya viajará después a España para participar en un acto en la universidad de Salamanca, pero sin definir que más hará.

Según los informes iniciales en Salamanca participará en la entrega de 120 becas a estudiantes latinoamericanos e intervendrá en el acto.

Pero un desplazamiento a Europa requiere más actividades para un mandatario y no sólo la presencia en un acto académico.

Debe agendar encuentros con las figuras de gobierno y extender su periplo a otras naciones.

Además de la cooperación gubernamental, los mandatarios en la actualidad buscan encuentros en las cámaras empresariales a fin de promover inversiones en sus países o abrir mercados en la nación visitada para los productos que procesa, en este caso los hondureños.

El presidente Zelaya debe redefinir en los dos años restantes sus viajes a las improductivas cumbres de mandatarios, excepto que el evento sirva para reunirse bilateralmente con un colega para casos particulares, o a tomas de posesiones.

Se necesita una agenda presidencial de viajes pro activa, que genere cooperación, inversiones y aperturas de mercados, eso es lo válido en el presente siglo.

spot_img
spot_img

Noticias recientes

spot_img
spot_imgspot_img