Tegucigalpa – Este 11 de septiembre se cumplen dos años desde los hechos lamentables que cobraron la vida de tres aspirantes a cadetes en un curso en la Academia Nacional de Policía (ANAPO), pero las respuestas de la justicia siguen distantes.
– Las familiares de las víctimas llegaron al MP para pedir justicia, al tiempo que aseguraron que los mataron por los métodos empleados en las pruebas físicas.
Wendy Sánchez, familiar del malogrado médico Kevin Mejía, pidió al Ministerio Público que interponga los respectivos requerimientos fiscales porque existe suficiente información sobre los hechos.
En tanto, Maritza Cruz, madre de Jairo Martínez Cruz lamentó que la justicia no actúe para garantizar justicia, “exigimos justicia, sólo les pedimos que se pongan en nuestros zapatos, Jairo tenía muchas aspiraciones y si la Policía le quitó la vida exigimos respuesta y no les tenemos miedo”.
Familiares de los malogrados aspirantes volvieron a exigir justicia y que se sepa la verdad de lo ocurrido en las instalaciones policiales hace dos años. Los hechos han quedado en la impunidad.
El domingo 11 de septiembre del 2022 en las instalaciones de la ANAPO, se reportó la muerte un aspirante y 34 personas afectadas, luego de imponerles prácticas para comprobar su condición física. Dos personas más fallecieron en los subsiguientes días.
Los fallecidos -en su momento- fueron identificados como Kevin Mejía, Jairo Josué Martínez Cruz y Ronald Javier Coello.
Ayer -martes- el ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez aseguró que las investigaciones confirmaron que no hubo dolo en las muertes de los aspirantes a cadetes. JS
