Tegucigalpa – La empresa privada hondureña paga anualmente unos ocho mil millones de lempiras para tener la seguridad que el Estado no está dando, cuestionó el gerente de política económica del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Santiago Herrera.
Asimismo, señaló que los empresarios hondureños también deben destinar recursos economistas para pagar el cobro de extorsión.
Herrera contrastó el alto porcentaje que se paga por la seguridad en el país versus los resultados obtenidos tras dos años y medios de vigencia de un estado de excepción que cubre la mayor parte del territorio nacional y que según el reciente informe de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) más de 384 mil hogares hondureños viven bajo la extorsión.
“En un país donde dedicamos un alto porcentaje a la seguridad y defensa, pagamos más de cuatro mil millones de lempiras en Tasa de Seguridad, las empresas pagan más de cuatro mil millones en servicios de seguridad, pero además se paga más de 700 millones de dólares en extorsión, eso representa casi el 2 % del PIB”, manifestó.
¿Qué hacemos gastando en cosas que no le generan una sola unidad de producto adicional?, cuestionó.
Indicó que en el país se está pagando para que no le roben ni lo maten, exponiendo que son las prioridades que deben compensar la sociedad ante la ausencia de seguridad que brinda el Estado
Los niveles de inseguridad no dejan de afectar el clima de inversión, reiterando que para que haya confianza se debe reducir los índices de incertidumbre y los grados de inseguridad jurídica, al mismo tiempo, incremente la certeza y la seguridad ciudadana.
El país no se encuentra en los niveles óptimos para que se invierta, es muy difícil que el país pueda crecer a tasas más altas de desarrollo económico y generar más producción y empleo, apuntó. AG
