Tegucigalpa – Un agrio debate protagonizaron en sus cuentas de redes sociales el actual vicecanciller Gerardo Torres y el exjefe de las FFAA, Romeo Vásquez. Ambos dispararon uno contra el otro con fuertes señalamientos.
El actual funcionario de Cancillería hondureña, esbozó que en las montañas de este país corren y se esconden cadejos castrenses, lloronas anticomunistas, siguanabas que son influencers, duendes robacarros y chupacabras narcotraficantes. El abominable huye, espantando niños cobardes con videos tontos.
Luego, Torres expresó: “Creo que ya es hora de atraparlo. Digámosle que le vamos a dar de nuevo todas las armas, que él volverá a ser el hombre fuerte y nosotros un montón de muchachos amontonados y asoleados, sin armas, tratando de arrebatarle de sus manos la democracia que tuvo secuestrada. Seguro no se aguanta la emoción y asoma la cabeza. Y la ponemos en la pared de alguna cabaña lujosa para turistas”.
Pongamos un par de ratoneras -prosiguió- en carros dejados puestos por distintos puntos del país, con olor a queso, para que a las ratas se les reactive su antigua condición de pinches robacarros. Vistámonos de camisetas blancas y como Julietas gritemos su nombre hasta que él solito baje.
Finalmente, exteriorizó: “Capturémoslo y cobramos esos tres millones de recompensa, y compramos para todos (golpistas y resistencias) mucho chocolate, frutos secos, huevo y aguacates que dicen son buenos para la memoria. Y que buena falta nos hace”.
A la mascota del Familión
De su lado, Romeo Vásquez -desde su condición de prófugo en la clandestinidad- expresó que “hay quienes se disfrazan de diplomáticos, pero solo son mascotas del poder. Gerardo Torres Zelaya, viceministro de Relaciones Exteriores, no representa a Honduras: representa a una familia que ha convertido al Estado en su finca personal. Su pluma no escribe por conciencia, sino por conveniencia”.
Acentuó que mientras el pueblo sufre apagones, desempleo y extorsión, él escribe fábulas con duendes y cadejos para atacar a quienes luchamos por la democracia real. No es casual: su trabajo es distraer, ridiculizar y sembrar odio desde la comodidad de un cargo heredado por apellido, no por mérito.
“La historia ya conoce a estos personajes: no lideran, obedecen. No piensan, repiten. Son funcionales a las dictaduras suaves, los que sin disparar un arma sostienen al régimen con palabras dulces y serviles. Pero Honduras está despertando. Y sabrá distinguir entre quien sirve a su patria… y quien ladra por su amo”, remató Vásquez Velásquez.
En una última intervención, el vicecanciller Torres refirió: “Le dolió General. Hay buen internet en el “cerro”…”.
Remató asegurando que “venga baje y me lo dice en la cara. Si no le tuve miedo antes menos ahora que pasó de asesino y hombre valiente a cobarde “influencer”, deje de quitarle el trabajo a su hija. Ella lo hace mejor”. JS