Tegucigalpa – Henry Rodríguez, jefe del departamento de economía de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), lanzó fuertes cuestionamientos sobre los exorbitantes montos que los políticos invierten en sus campañas electorales, alertando sobre la falta de transparencia en el origen de estos fondos.
Rodríguez señaló que un diputado hondureño, a lo largo de sus cuatro años en el Congreso Nacional, devenga aproximadamente ocho millones de lempiras en salarios y beneficios. Sin embargo, hay aspirantes que gastan mucho más en sus campañas y ni siquiera logran ser electos, y muchas veces lo que genera dudas sobre la procedencia de esos recursos.
«Ahí es donde se requiere transparencia. Como se ha visto ante la Unidad de Política Limpia, muchos políticos no presentan sus cuentas”, y existen antecedentes de dinero de dudosa procedencia en campañas pasadas, expresó Rodríguez.
El economista destacó que «nadie invierte algo si no espera una retribución», sugiriendo que quienes financian sus campañas con recursos de origen cuestionable terminan pagando favores una vez en el poder.
Rodríguez lamentó que en Honduras la política sea vista más como una oportunidad para enriquecerse que como un servicio social. «Se esperaría que un político trabajara desinteresadamente por el desarrollo del país, pero desgraciadamente no es así. Son pocos los que no persiguen sus intereses particulares», afirmó.
Estas declaraciones se suman a los constantes reclamos de la sociedad civil sobre la necesidad de regular con mayor rigurosidad el financiamiento político en el país, especialmente en un contexto donde la corrupción sigue siendo una de las principales preocupaciones de la ciudadanía. LB
