Ciudad de México.– Un juez mexicano vinculó a proceso por un nuevo delito a Gildardo Palominos, a quien se le relaciona con el grupo criminal La Línea y a la masacre ocurrida el 4 de noviembre de 2019 en contra de las familias LeBarón, Langford y Miller, en Sonora, norte de México.
La Fiscalía General de la República (FGR) informó este domingo en un comunicado que esta vinculación se debe al delito de portación de arma de fuego de uso exclusivo las Fuerzas Armadas.
El sujeto, conocido como el ‘G-3’, fue aprehendido por elementos de la Guardia Nacional (GN) en julio de 2020 en Nuevo Casas Grandes, en el norteño estado de Chihuahua.
En ese entonces, las autoridades mexicanas le encontraron un arma de fuego abastecida con 12 cartuchos, 14.620 pesos (796,3 dólares), una navaja y otras pertenencias.
La vinculación la otorgó el juez de control especializado en el sistema penal acusatorio de la cárcel de máxima seguridad de Almoloya de Juárez, en el central Estado de México, quien decidió imputarle este delito y mantenerlo en prisión preventiva.
Además, el juzgador definió dos meses de plazo para que las autoridades ministeriales concluyan la investigación complementaria.
‘El G-3’ también enfrenta otro proceso penal aparte del antes mencionado.
En su cuenta de X, Adrián LeBarón actualizó ayer que van 34 personas detenidas y que están relacionadas con la masacre de noviembre de 2019 en el norte de México.
De estos, preciso que 22 están vinculados por delincuencia organizada y 12 más por homicidio.
No obstante, criticó que ninguno de los casos de homicidio se ha llevado a juicio, mientras que dos personas han recibido ya penas por delincuencia organizada y otras dos más han sido enjuiciadas por procedimientos abreviados.
“Hay algo que me preocupa, en el último año solo se detuvieron a 3 personas; según la fiscalía fueron más de 100 los que participaron en la masacre, a este ritmo faltan 22 años para detener a todos los asesinos”, señaló uno de los representantes de la familia LeBarón. EFE/ir
