Guatemala.- Autoridades del partido guatemalteco Unión del Cambio Nacional (UCN) dijeron este jueves estar «sorprendidas» por la detención en EE.UU. de su candidato a la Presidencia, Mario Estrada, y aseguraron que seguirán trabajando a la espera de que se «resuelva» la situación de su aspirante.
En una conferencia de prensa en su sede central, delegados miembros de la UCN apoyaron al secretario general de la organización y al candidato a vicepresidente, Jorge Pasarelli y Javier Castillo, respectivamente, quienes encararon los cuestionamientos de la prensa al asegurar su «sorpresa», que acatarán las decisiones jurídicas y solicitando «respeto a la presunción de inocencia».
Si bien el Departamento de Justicia de EE.UU. señaló a Estrada de tener vínculos con el cartel de Sinaloa para buscar financiación para su campaña política y el partido UCN, además de apoyarlo para asesinar a sus rivales políticos, tanto Pasarelli como Castillo dijeron desconocer tal extremo y aseguraron que las finanzas del partido están «en orden».
El candidato a la Vicepresidencia afirmó que junto con Estrada «teníamos un proyecto de amor a Guatemala», recordando uno de los eslóganes del aspirante presidencial retenido en el que decía, junto a su foto besando a un niño, «Guatemala, porque te quiero te cuido».
Dijo que a lo interno del partido van «a hablar con el comité ejecutivo nacional» y tomarán «una decisión» sobre la candidatura a la primera magistratura del país y negó que el partido haya recibido en ningún momento dinero «de forma ilícita», pues, «el dinero de la campaña ha provenido de la deuda política y de aportes de los miembros».
Sin embargo, aseguró que tienen muy buenos candidatos a alcalde y a diputados», entre los que se encuentra Ernesto José Degenhart Asturias, el hermano del ministro de Gobernación, Enrique Degenhart.
Pese a que tanto Castillo como Pasarelli ofrecieron abrir los libros de contabilidad de la organización política y «demostrar» que todo está en orden, dijeron que la llave de la puerta del área de finanzas «no estaba, porque es Jueves Santo», y ambos añadieron que no recuerdan cuánto ha entrado y salido de las cuentas de la UCN.
Consultado acerca del viaje de Estrada a EE.UU., donde fue detenido en Miami, el secretario general del partido afirmó que el candidato le había dicho que viajaría a ese país «para descansar», y, aunque Pasarelli aceptó ser el encargado de la agenda de Estrada, dijo que no sabía los motivos del viaje ni los sitios en los que estaría el aspirante a la Presidencia.
Castillo también comentó que había hablado con su compañero de fórmula después de una actividad de campaña el miércoles por la mañana y que solo le había asegurado que se volverían a reunir «hasta el domingo» 21 de abril.
Pese a que se trata de su candidato a la Presidencia, la UCN «no acompañará (a Mario Estrada) en su proceso legal en EE.UU.», indicó Pasarelli, quien afirmó que de eso se encargaría la familia, pues «se trata de un asunto personal», apuntó sin tomar en cuenta que la acusación del Departamento de Justicia estadounidense menciona a la organización política que dirige.
El secretario general de la UCN también dio detalles sobre la otra persona detenida junto a Estrada (Juan Pablo González Mayorga), quien es el tercer secretario adjunto del partido.
«Juan Pablo llegó hace dos años a la UCN y fue aceptado. Es un empresario que trabaja en el área de construcción y tampoco sé qué estaba haciendo allá (en EE.UU. junto a Mario Estrada)», detalló.
De acuerdo con el texto, desde diciembre del 2018 la agencia antidrogas de EE.UU. (DEA) ha estado investigando a varios individuos por intentar solicitar dinero de carteles de la droga para apoyar la campaña presidencial de Estrada.
Durante algunas de estas negociaciones, que se realizaron en Guatemala y Florida este año, miembros de ese grupo, incluyendo a Estrada, de 58 años, y a González, de 50, interactuaron con supuestos miembros y asociados del Cartel de Sinaloa, una poderosa organización internacional de tráfico de drogas de México, que eran fuentes confidenciales de la DEA.
En el curso de estas reuniones y otras comunicaciones, algunas de las cuales fueron grabadas en vídeo y audio, Estrada y González presuntamente pidieron millones de dólares al Cartel de Sinaloa, procedentes de la venta de drogas, para apoyar la campaña presidencial, a cambio de respaldo al cartel para el tráfico de drogas.
Además, la acusación subraya que Estrada y González pidieron a los informantes de la DEA que contrataran a sicarios para asesinar a los rivales políticos y asegurar así que Estrada fuera electo presidente de Guatemala.