Tegucigalpa – La dirigencia del sector privado hondureño demandó que las medidas de alivio fiscal adoptadas por el gobierno hondureño para beneficiar a las micros, pequeñas y medianas empresas deben extenderse en los próximos días a las grandes empresas, como única forma de poder salvar empleos en medio de la devastación económica generada por la pandemia del Covid 19, que azota al país y al planeta.
-Proponen Gran Pacto de Unidad, para aprovechar el sentimiento de unidad que hay en el país.
-Empleos se perderán, pero se busca que sean menores. PIB cayó 5.9 por ciento y puede caer más.
El Covid 19 ha golpeado a todo el aparato productivo nacional por la paralización económica cuyas consecuencias los observadores consideran superiores en mucho por los daños ocasionados durante los desastres provocados por el huracán Mitch a finales de 1998 o la crisis política de 2009.
En ese sentido líderes empresariales coincidieron este martes al señalar que la crisis golpeará profundamente a la economía nacional y que se perderán empleos y muchas empresas cerrarán, pero lo que se busca es que el golpe sea lo más leve posible y que se pierdan la menor cantidad de puestos de trabajo.
Presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Juan Carlos Sikaffy
Lo anterior lo señalaron el presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Juan Carlos Sikaffy, y los presidentes de las poderosas cámaras de Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT) y de Cortés (CCIC), José Luis Rivera y Pedro Barquero respectivamente, en su intervención en el foro Frente a Frente de Televicentro, que dirige Renato Alvarez.
Sikaffy fue enfático al señalar que lo anunciado la noche del lunes junto al presidente Juan Orlando Hernández y el secretario de la Central general de Trabajadores, Daniel Durón, en la cual se difieren ciertos pagos de impuestos y las declaraciones que deben hacerse, solo son el primer paquete de medidas, ya que deben venir otras, ya que las mismas no son suficientes para atender la dimensión del problema que enfrentará el país una vez que pase la emergencia.
También pronóstico que la crisis “va para largo, no saldremos antes del 30 de abril” e incluso dijo que cree que la cuarentena se extenderá a dicha fecha, lo que implicaría una paralización de 45 días para el aparato productivo nacional, cuyo engranaje “se ha venido abajo”, externó el jefe de la patronal hondureña.
El presidente del Cohep destacó que las grandes empresas tienen miles de empleos directos, pero resaltó que lo más importante es que las medianas, micros y pequeñas empresas dependen de ellas, ya que los productos y servicios que ofrecen están dirigidas a las grandes compañías.
El dirigente empresarial resaltó que todas las grandes empresas ya pagaron los salarios de la segunda quincena o de todo el mes de marzo, a pesar de que tienen dos semanas de plena inactividad.
Asimismo, destacó que las grandes empresas contribuyen con el 80 por ciento de los impuestos que recauda el gobierno, de ahí la clave para compensarla con medidas de alivio, reiterando que en los próximos días se anunciarán las acciones en beneficio de estas, con la finalidad de mantener los empleos requeridos.
Indicó que en el país hay 230 mil empresas, de las cuales el 99 por ciento son Mipymes y dijo que ellos han acuerpado las medidas que les benefician, pero agregó que las mismas son insuficientes.
Efectos
Sikaffy adelantó que si se extiende la paralización más del mes de abril habrá mucha muerte de empresas y con ello la pérdida de empleos será grande.
Indicó que en el Cohep han propuesto una serie de medidas al gobierno, pero adelanto que ante la situación extrema que se vive, se deben tomar medidas extremas.
Anticipó que pidieron una reducción del encaje legal a los bancos al 12 por ciento, tanto en lempiras como dólares, ya que actualmente la economía se mueve a lo máximo al 30 por ciento de su potencial.
Sikafy dijo que la paralización de actividades provocó pérdidas diarias de 1,300 millones de lempiras, que en los 30 días que dure el toque de queda significará daños de 39 mil millones de lempiras, lo que genera desde ya una contracción del 5.9 por ciento del producto interior bruto (PIB).
El titular del Cohep destalló que si se extiende a 45 días el estado de emergencia el PIB caerá en 9.5 por ciento.
Ejemplificó que con el huracán Micht y la crisis económica y política del 2009 la economía se contrajo un 3 por ciento.
Por ello recomendó que el gobierno deba adoptar medidas excepcionales como salir a pedir prestado unos 2,500 millones de dólares.
Sikaffy señaló que está crisis de la pandemia del coronavirus es un parteaguas para el país y en ese sentido pidió que la nación no pague la deuda externa.
El líder empresarial dijo que es el momento de forjar un Gran Pacto Nacional por Honduras, que sea a largo plazo, donde los proyectos que se propongan puedan ver la realidad.
Equidad
Pedro BarqueroEl presidente de la CCIC, Pedro Barquero, destacó que las medidas iniciales son un buen paso, pero insistió que las mismas deben extenderse a los otros sectores, como las personas, el sector informal y las grandes empresas, porque está crisis golpeará a todos.
EL dirigente gremial del norte reconoció que lo difícil de la situación y que el impacto en el empleo será enorme, recomendando que el conjunto de la sociedad deba saber que se perderán puestos de trabajo y muchas empresas cerrarán, así como se admite que en el sector sanitario lo peor está por venir.
Barquero dijo que las grandes empresas pueden aguantar más que las Mipymes, pero no soportarán mucho, ya que se pasó dos semanas sin actividad.
Por ello recomendó que no debe existir discriminación en las políticas públicas en cuanto a implementar medidas de alivio, así como lo necesitan las Mipymes, también lo ocuparán las personas, el sector informal y las grandes empresas, hasta ahora discriminadas en los beneficios.
El presidente de la CCIC dijo que la Constitución de la República señala que ningún sector debe ser discriminado o excluido de las medidas gubernamentales.
Sugirió al gobierno y a los demás sectores moverse rápido, adoptar las medidas e implementarlas, porque de lo contrario el país ingresará en una profunda recesión y en la pérdida del PIB, después de la pandemia.
Insistió que todos los sectores deben ser aliviados y motivados, de lo contrario la “economía sufrirá más”, señalando que todavía no se ha alcanzado la parte fuerte de la crisis.
Barquero sugirió al gobierno que aproveche el sentimiento de unidad que existe en el país para escuchar a todos los sectores para salir de la crisis post COVID-19.
Indicó que se deben tomar decisiones valientes, porque el mayor riesgo será no adoptarlas.
Saldremos de la crisis
José Luis Rivera (CCIT)El titular de la cámara empresarial de Tegucigalpa, José Luis Rivera, señaló que todos los sectores deben ser solidarios, eficientes y ahorradores, afirmando que será difícil, pero no imposible salir de la actual crisis provocada por la enfermedad y que ha golpeado a la economía.
Indicó que las medidas de alivio deben ser extensibles a todos los sectores, en el sector informal hay 1.7 millones de personas, así como las grandes empresas, que son el sostén central de la economía, ya que las micros y pequeñas empresas dependen de las mayores.
Rivera dijo que el desequilibrio inicial ya pasó, ahora se está operando en forma regulada, en alusión a que el gobierno autorizó la operación de supermercados, bancos, gasolineras y farmacias en forma limitada.
Indicó que el sistema bancario será importante para salir de la crisis, ya que será el canal para distribuir recursos, por lo que pidió que sea flexible para liderar la recuperación.