Tegucigalpa – La circulación de personas en las calles en Honduras pese al toque de queda absoluto ordenado por el gobierno es preocupante, manifestó este sábado el médico hondureño Orlando Garner, de medicina interna del Texas Tech University Health Sciences Center, con sede en Houston.
“Si hay gente aún circulando en las calles y tratando de llevar su vida normalmente es algo preocupante, porque la responsabilidad que tenemos como sociedad e inclusive una sociedad con recursos tan precarios como Honduras, el distanciamiento social y creo que se debe enfatizar de manera enérgica a la población de que esto no es un juego y millones de hondureños se están jugando la vida”, señaló Garner en declaraciones al noticiero televisivo TN5 Matutino.
Apuntó que en conversaciones con colegas y médicos de Honduras, ha expresado que el sistema sanitario de Honduras no se presta a atender a pacientes de gravedad si se llega a desatar la pandemia en el nivel que están sufriendo los italianos, los franceses, los españoles, los chinos y los mismos estadounidenses como ocurre mayormente en los estados de Nueva York, California y Washington.
“Lo digo y creo que es importante para que los hondureños se miren en el espejo y se den cuenta que estamos hablando de países del primer mundo, no estamos hablando de países que están en vías de desarrollo, que no tienen medicina moderna, estamos hablando de naciones que cuentan con los mejores sistemas de salud a nivel mundial”, reflexionó Garner.
Señaló que, si esos países de primer mundo se ven doblegados por la pandemia, Honduras no va a tener la capacidad de afrontar la pandemia porque si el paciente se llega a enfermar de gravedad, no hay suficientes ventiladores en el país para darle al paciente una ventilación mecánica.
“Como lo dijo la doctora Elsa Palau hace unos días en el país sólo hay 100 ventiladores mecánicos y luego hicieron la compra creo de otros 140 y sin entrar en controversia, porque en realidad no conozco las especificaciones de los ventiladores que compraron, por lo que me han reportado no son los adecuados, y si se llegaran a enfermar todos los hondureños, alrededor de 400 mil pacientes necesitarían cuidados intensivos y no hay la capacidad ni en ventiladores ni en recursos humanos para darle atención a tanta gente, no hay la capacidad ni en Estados Unidos”, advirtió.