El pasado 10 de agosto un jurado brasileño condenó a 17 años y nueve meses de prisión a Eurico Mariano, ex alcalde de la ciudad de Coronel Sapucaia, en el estado de Mato Grosso do Sul, como autor intelectual del asesinato en 2004 del periodista paraguayo Samuel Román.
Román, periodista de las emisoras de radio Ñu Verá y Conquista FM de la municipalidad de Capitán Bado, localizada en la zona fronteriza de Paraguay con Brasil, fue atacado por dos hombres en motocicleta que le dispararon once veces cuando se dirigía a su domicilio, en la ciudad brasileña de Coronel Sapucaia.
El periodista paraguayo dirigía el programa «La voz del pueblo», muy crítico con la gestión de la administración pública.
«Esta sentencia es un paso positivo en la lucha contra la violencia que afecta a los periodistas en zonas fronterizas, y muy especialmente porque se trata de castigar a un autor intelectual, algo que es bastante inusual en casos de asesinatos contra periodistas», dijo Gonzalo Marroquín, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP.
Pese a que un total de nueve personas fueron acusadas por el crimen de Román, la mayoría de ellas ciudadanos paraguayos, hasta el momento Mariano ha sido el único juzgado por esta muerte.
Según sostuvo Ricardo Rotunno, fiscal del caso, el reo tramó el asesinato del periodista para silenciar las denuncias que éste lanzaba en su contra desde su programa de radio.
Las estadísticas de la SIP muestran que en los últimos años la justicia brasileña ha llevado ante los tribunales otros trece casos de asesinatos de periodistas por los cuales fueron emitidas 29 sentencias y 21 personas permanecen encarceladas.
La SIP, en su reciente libro Mapa de Riesgo para Periodistas, que forma parte de su Proyecto Contra la Impunidad, financiado por la Fundación John S. y James L. Knight, identifica las zonas fronterizas entre Brasil y Paraguay y entre México y Estados Unidos, además de Colombia, como las áreas más peligrosas para los periodistas en las Américas.