Según López, los auditores descubrieron un gigantesco “despilfarro” de recursos y varios actos anómalos, que van desde cobros excesivos por la extensión de pasaportes, salvoconductos y otros documentos oficiales a inmigrantes hondureños, así como depósitos y manejo de dineros en cuentas personales de los cónsules y falta de documentación de todos los gastos que realizan.
Por esta situación, el TSC formulará en los próximos días los correspondientes reparos a los cónsules de Nueva York, Javier Hernández; de Nueva Orleáns, Ena Castro y de la ciudad de Houston, Lastenia Pineda.
“Las investigaciones ya concluyeron, pero todavía no se han formulado los reparos definitivos, en virtud que esos reparos ya fueron comunicados a las personas para que presenten los desvanecimientos previos, que es el procedimiento que sigue el Tribunal”, aseveró López en una entrevista a Radiocadena Voces.
Afirmó que hasta el momento no se han formulado las responsabilidades porque esperarán que los funcionarios señalados presenten los documentos de respaldo que tienen en su poder para desvanecer los pliegos de responsabilidades, para lo cual tienen un plazo de 60 días.
“En el caso de que esto no suceda el TSC hace las responsabilidades correspondientes, hace los trámites internos y después se les notifica oficialmente ya como reparo formalizado para que ellos procedan a impugnar”, indicó.
Hace algunos meses, los mencionados agentes diplomáticos fueron denunciados por compatriotas que viven en EE UU por la aplicación de cobros excesivos que iban desde los 50 a los 200 dólares por trámites como el llenado de formularios del Estatus de Protección Temporal (TPS) hasta por la entrega de un pasaporte.
López explicó que en la investigación revela que los consulados han operado al “libre albedrío”, ya que no existe un control en el manejo del presupuesto y las cuentas son administradas de forma discrecional y personal por los cónsules, al descubrirse dinero perteneciente a la delegación diplomática en sus cuentas personales.
“Esto es considerado una irregularidad, pero lo mismo se debe a los procedimientos que han venido estableciéndose o las condiciones bajo los cuales son nombrados los cónsules porque da la impresión de que es una especie de compensación por trabajo político realizado o amistad”, apuntó.
Las indagaciones duraron 15 días y para ello el TSC desplazó a Estados Unidos un equipo de cinco auditores.
López dijo que con este trabajo, el TSC está procurando poner fin a estas prácticas anómalas, ya que la mayoría de consulados en Estados Unidos y el mundo “están en la misma situación”.
Dijo que el problema de los consulados de Honduras en el extranjero es que han operado al “libre albedrío”, lo que ha dado lugar a que sus encargados incurran en muchas faltas y anomalías.
“La verdad que al igual que el gobierno en general, no se tiene controles en las instituciones y los consulados no son la excepción, por eso el papel del TSC es ahora que se establezcan controles en cada una de las dependencias para saber realmente como es que se están manejando los recursos del Estado”, anotó.
El funcionario no quiso precisar el monto total de los reparos, pero preliminarmente estimó que ascienden a unos 30 a 40 millones de lempiras.
Caso de Belice
![]() | El cónsul de Belice, Carlos Hernández, no reportó por un período de ocho meses los 89 pasaportes a pesar de que cada 30 días los cónsules están obligados a enviar un informe de sus actuaciones. El hecho dio pie a una investigación, pero al final las autoridades lo calificaron como “error administrativo”. |
Ante el descubrimiento de este escándalo, el referido cónsul fue enviado a la embajada de Honduras en El Salvador, a desempeñar el mismo cargo.
A pesar de la gravedad del hecho, las autoridades de la Cancillería señalan que el “error administrativo” del cónsul Hernández no amerita una sanción, ni un llamado de atención, pero deja abierta la posibilidad que los auditores del TSC puedan realizar una investigación para deducir responsabilidades.
Hernández se mantiene en el cargo en El Salvador, aunque algunos diplomáticos recomiendan su suspensión inmediata, ya que consideran que existieron anomalías administrativas en el manejo de los pasaportes, que no solo se subsanan con la devolución del dinero que el Estado pudo dejar de percibir.
Las denuncias de malos manejos en los diferentes consulados no son nuevas, pero es la primera vez que el Tribunal Superior de Cuentas confirma sendos reparos contra representantes diplomáticos hondureños.
Cónsul se defiende
Entrevistada por la vía telefónica, la cónsul de Honduras en la ciudad de Nueva Orleáns, Ena Castro, una de las señaladas, se defendió diciendo que en está representación “jamás se le cobró a nadie ningún centavo de demás”.
La funcionaria se mostró molesta y dijo estar sorprendida por el hecho que la información trascienda a la opinión pública hondureña, en vista que las investigaciones aún no han concluido.
No obstante, indicó que está anuente de que se le investigue y argumentó que si su trabajo fuera malo ya no estuviera en el cargo.
La funcionaria dijo que ella solo tiene ocho meses de haber asumido la dirección del consulado en Nueva Orleáns, pero la investigación que realiza el TSC es desde el 2003, es decir, que abarca a la anterior administración.
“Yo llegue en septiembre 21 y tomé posesión de la administración en esa fecha y yo soy responsable desde el 21 de septiembre de 2006 a lo presente, o sea, que ellos tienen que llegar atrás de mi, pero como soy la actual cónsul desafortunadamente todo me cae a mí”, arguyó.