Tegucigalpa.- El ex presidente de Honduras Roberto Suazo Córdova desmintió personalmente un rumor sobre su muerte que se regó hoy como pólvora a través de medios locales de prensa.
Con una de sus famosas frases, «estoy tranquilo y sereno», el propio Suazo Córdova, quien fue presidente de Honduras entre 1982-1986, hizo el desmentido en una comunicación telefónica con el actual gobernante, Manuel Zelaya, que también había creído el rumor.
La noticia del deceso la hizo trascender el presidente del Parlamento hondureño, Roberto Micheletti, del gobernante Partido Liberal, al que también pertenece Suazo Córdova.
Según Micheletti, una fuente, a la que no identificó, le dijo que el ex presidente había muerto y él la comunicó a reporteros locales.
Tras la versión que trascendió a través de las principales cadenas de radio del país, comenzaron a surgir reacciones, como la de Carlos Montoya, ex presidente del Parlamento, quien muy emocionado reseñó con elogios la trayectoria política del ex mandatario.
El presidente Zelaya también creyó la noticia e incluso pronunciaba frases de elogio para Suazo Córdova y anunciaba funerales de Estado en su honor cuando se produjo el desmentido.
Zelaya envió las condolencias a la familia de Suazo Córdova, a los hondureños en general y al Partido Liberal, y anunció: «instruyo a todos los miembros del gobierno que a partir de mañana se le den todas las honras fúnebres que merece el ex presidente de la República que ha fallecido».
El gobernante incluso anunció que cancelaba varios actos oficiales que tenía previstos, «con el fin de atender en forma personal las exequias del doctor Roberto Suazo Córdova, que en paz descanse».
Pero, alertado por colaboradores suyos, y delante de los periodistas, Zelaya se comunicó con Suazo Córdova, quien desde la cama de un hospital privado en Tegucigalpa, al que fue ingresado anoche, al parecer afectado por dengue, le respondió que sigue «tranquilo y sereno».
«Ya escucharon: el ex presidente Suazo Córdova está vivíto y coleando», expresó el presidente Zelaya al confirmar que el octogenario ex gobernante no se ha muerto y, acto seguido, se disculpó con la familia, con sonrisa.
Para cerrar el episodio, el presidente del Parlamento, quien aspira a la candidatura presidencial liberal para las elecciones de 2009, también pidió disculpas por haber echado iniciado el rumor, actitud que algunos periodistas calificaron de «caballerosa».
Suazo Córdova, un médico de provincia que también fue presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, que redactó la actual Constitución de Honduras y convocó a elecciones generales para noviembre de 1981, reside en la ciudad de La Paz, unos 70 kilómetros al norte de Tegucigalpa, donde también es conocido como el «brujo».
Otros ex gobernantes hondureños a los que la prensa «mató» antes de tiempo fueron el general Policarpo Paz García y Carlos Roberto Reina, ambos ya fallecidos, pero mucho después de lo que algunos periodistas comunicaron.
La noticia del deceso la hizo trascender el presidente del Parlamento hondureño, Roberto Micheletti, del gobernante Partido Liberal, al que también pertenece Suazo Córdova.
Según Micheletti, una fuente, a la que no identificó, le dijo que el ex presidente había muerto y él la comunicó a reporteros locales.
Tras la versión que trascendió a través de las principales cadenas de radio del país, comenzaron a surgir reacciones, como la de Carlos Montoya, ex presidente del Parlamento, quien muy emocionado reseñó con elogios la trayectoria política del ex mandatario.
El presidente Zelaya también creyó la noticia e incluso pronunciaba frases de elogio para Suazo Córdova y anunciaba funerales de Estado en su honor cuando se produjo el desmentido.
Zelaya envió las condolencias a la familia de Suazo Córdova, a los hondureños en general y al Partido Liberal, y anunció: «instruyo a todos los miembros del gobierno que a partir de mañana se le den todas las honras fúnebres que merece el ex presidente de la República que ha fallecido».
El gobernante incluso anunció que cancelaba varios actos oficiales que tenía previstos, «con el fin de atender en forma personal las exequias del doctor Roberto Suazo Córdova, que en paz descanse».
Pero, alertado por colaboradores suyos, y delante de los periodistas, Zelaya se comunicó con Suazo Córdova, quien desde la cama de un hospital privado en Tegucigalpa, al que fue ingresado anoche, al parecer afectado por dengue, le respondió que sigue «tranquilo y sereno».
«Ya escucharon: el ex presidente Suazo Córdova está vivíto y coleando», expresó el presidente Zelaya al confirmar que el octogenario ex gobernante no se ha muerto y, acto seguido, se disculpó con la familia, con sonrisa.
Para cerrar el episodio, el presidente del Parlamento, quien aspira a la candidatura presidencial liberal para las elecciones de 2009, también pidió disculpas por haber echado iniciado el rumor, actitud que algunos periodistas calificaron de «caballerosa».
Suazo Córdova, un médico de provincia que también fue presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, que redactó la actual Constitución de Honduras y convocó a elecciones generales para noviembre de 1981, reside en la ciudad de La Paz, unos 70 kilómetros al norte de Tegucigalpa, donde también es conocido como el «brujo».
Otros ex gobernantes hondureños a los que la prensa «mató» antes de tiempo fueron el general Policarpo Paz García y Carlos Roberto Reina, ambos ya fallecidos, pero mucho después de lo que algunos periodistas comunicaron.
