«Nos resistimos a pensar que la solución a la problemática hondureña esté en manos del Gobierno estadounidense», comentó la diputada del UD, Silvia Ayala.
En una conferencia de prensa en París, Ayala confió que «quien tiene la solución a la crisis hondureña es el pueblo hondureño y quien ha empujado esta condena unánime de la comunidad internacional es precisamente el pueblo hondureño, resistiendo».
Esta postura, no obstante, no está generalizada entre los zelayistas, pues, como comentó la diputada, es un colectivo en el que reina «una diversidad amplísima ideológica y política».
Ayala anunció que si se da por fracasada la cuarta mesa de diálogo, la resistencia abordará «un replanteamiento de la acciones con el objetivo de generar un mayor nivel de presión», como la convocatoria de un paro nacional, la toma de carreteras o el bloqueo del Puerto Cortés, el principal de Honduras.
El consejero de Manuel Zelaya, Allan Fajardo, y la representante del Movimiento Feminista en de los zelayistas, Melba Reyes, también presentes en la conferencia de prensa, coincidieron con Ayala en reiterar que condicionan su participación en los comicios del próximo 29 de noviembre a la «restitución del presidente depuesto».
Tras una reunión en el Senado galo con el Partido Comunista francés, la delegación zelayista espera que Francia condene la salida de Manuel Zelaya, exija su restablecimiento, no reconozca las elecciones y no envíe observadores.