El portavoz de la institución militar, Ramiro Archaga, dijo al presentar ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) el plan de seguridad y logística para garantizar esos comicios que impedirán que el proceso sea saboteado, como ha anunciado el movimiento que exige el regreso del mandatario derrocado.
El ministro de Defensa, Adolfo Sevilla; el jefe del Estado Mayor Conjunto, el general Romeo Vázquez, y otros miembros del alto mando castrense expusieron el plan a los magistrados del TSE, presidido por Saúl Escobar, en la sede de la institución militar.
Archaga explicó que el programa incluye aspectos como los recursos humanos, técnicos y materiales a utilizarse y las rutas para la distribución del material electoral.
También abarca la seguridad de las instalaciones del Tribunal Supremo Electoral, de las bodegas de materiales electorales y de las imprentas donde se elaborarán las papeletas, entre otros lugares, añadió.
Los militares ya están cumpliendo algunas funciones de seguridad relacionadas con el proceso electoral, refirió.
El portavoz militar recordó que la Constitución hondureña establece que a partir del 29 de octubre, un mes antes de los comicios, las Fuerzas Armadas pasarán a disposición total del TSE para garantizar los comicios.
Esta medida constitucional es reiterada, entre otros puntos, en el Acuerdo de San José propuesto por el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, en su función de mediador en la crisis hondureña causada por el derrocamiento de Zelaya el pasado 28 de junio.
Los hondureños votarán en noviembre para elegir presidente, tres designados presidenciales (vicepresidentes), diputados y alcaldes para el período 2010-2014.
El nuevo mandatario asumirá el 27 de enero próximo.







