Tegucigalpa – Las conclusiones de la Corte Penal Internacional (CPI), que estableció que “no hubo crímenes de lesa humanidad,” por parte de las autoridades hondureñas, durante la crisis política de 2009, los beneplácitos y los sinsabores de protagonistas marcaron el evento.
Este jueves, la Fiscalía de la Corte Penal Internacional publicó y distribuyó a los Estados miembros del Estatuto de Roma, su informe sobre la situación de los exámenes preliminares correspondiente a 2013, que contiene una evaluación jurídica de las denuncias presentadas por diferentes Organizaciones No Gubernamentales (ONG), de defensa de los derechos humanos sobre supuestos crímenes de lesa humanidad cometidos en Honduras con ocasión de los hechos del 28 de junio de 2009 y que terminó con el derrocamiento del entonces presidente Manuel Zelaya, quien fue expulsado del poder cuando promovía una consulta, tendiente a continuar en el mando del país, en desacato a la ley.
En el informe, la Fiscalía de la Corte Penal Internacional manifiesta que “después de un análisis cuidadoso de los hechos, ha concluido que no existe una base razonable para creer que los actos atribuidos a las autoridades hondureñas en ese corto período de tiempo, constituyen crímenes de lesa humanidad”.
Romeo Vásquez: Más bien se salvaron vidas
Proceso Digital consultó a varios actores de la crisis política de 2009. Uno de ellos, el entonces jefe de las Fuerzas Armadas, Romeo Vásquez Velásquez, quien señaló que el informe presentado por la Corte Penal Internacional viene a ratificar que aquí en Honduras lo que se buscó en la crisis de 2009, fue salvar vidas.

Al referirse a que debió esperar cuatro años por la posición de la CPI, Vásquez Velásquez dijo que “la verdad siempre va a prevalecer y cueste lo que cueste en la historia nunca queda oculta la verdad, eso es lo más importante”.
Luego manifestó que “a todas estas personas que me acusaban que Dios los juzgue, porque yo no tengo problemas en ese sentido, siempre he sido una persona temerosa y con mucho amor en mi corazón. Que los perdone Dios, porque yo no tengo problemas en ese sentido”.
Juan Barahona: “Qué vergüenza esto, qué vergüenza”

Continuó que “Claro que hubo crímenes, lo que pasa es que ellos (CPI) están tomando en cuenta el informe del gobierno y para el gobierno nunca hubo crímenes. Hubo muchos crímenes y que lo nieguen es otra cosa y que la Corte no lo reconozca, también”, dijo.
Barahona lamenta que la CPI, a su juicio, sólo tome en cuenta el informe del gobierno y no el que presentaron las organizaciones de Derechos Humanos de Honduras.
“Es un informe parcializado y no objetivo y basado en la realidad. No aprobamos este informe porque niega la verdad, nosotros siempre hemos estado luchando porque se conozca la verdad y haya castigo a los responsables de todos esos crímenes”, acotó.
Luego apuntó que “estos crímenes políticos no pueden quedar impunes, porque hay nombres y apellidos de los culpables y responsables”.
Micheletti prefiere estudiar el informe

“Quiero agarrar el documento para ver todo el contenido. Unos amigos me dijeron que nos absuelven de cualquier señalamiento de casos de crímenes de lesa humanidad”, dijo en escuetas declaraciones a Proceso Digital.
Puntualizó que “prefiero leerlo (documento) con tranquilidad para dar una reacción más apegada al informe”.
Micheletti ejerció en forma interina la presidencia del país, tras el derrocamiento de Manuel Zelaya. Ambos eran, en ese momento, militantes del Partido Liberal.
Méndez: La CPI no tenía suficiente información

“A mí me mandaron un informe en el que la Corte (Penal Internacional) estaba diciendo que faltaba información y que Honduras había estado proporcionando la información adecuada, tendría que esperar a ver el informe”, dijo.
Remarcó que “es importante ver los fundamentos de derecho sobre los que se ha fundamentado la Corte. Un colega me reportó sus preocupaciones porque la Corte Penal Internacional no tenía información suficiente sobre Honduras, pero lo que hoy me reportan es otra cosa”.
Oliva acusa a Cancillería de influir en informe de la CPI

“A nosotros nos asustó muchísimo porque eso no tiene nada que ver con Cancillería, porque la Corte Penal Internacional no hace persecución al Estado, si no que lleva a cabo deducción, observación e investigación a las personas denunciadas”, explicó.
Oliva criticó a la actual administración gubernamental porque, según ella, se ha prestado al juego de los que llevaron a cabo crímenes de lesa humanidad durante la crisis política de 2009.
“Si la resolución de la Corte Penal Internacional es que aquí no hubo crímenes de lesa humanidad, ellos son influenciados por los niveles de impunidad que imperan en nuestro país, porque sí hubo crímenes de lesa humanidad, hay una continuación del golpe, eso se demuestra en la cifra de asesinatos que son por motivaciones políticas”, concluyó la defensora de derechos humanos.