Tegucigalpa – La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días abrió hoy en Honduras su templo número 141 en el mundo, aunque el «día de dedicación», que representaría la inauguración de la lujosa obra, será el 17 de marzo próximo.
El impresionante templo fue construido en el extremo sur de Tegucigalpa en un tiempo de casi tres años, dijo a Efe uno de los consejeros gobernantes de la iglesia, James Martino, tras un recorrido con la prensa para conocer la obra.
«No es algo barato, pero no sé. Se han utilizado los mejores materiales para construir el templo que es la casa de Dios», respondió Martino cuando se le preguntó el coste del lujoso templo, en el que señaló que la mayoría de los materiales y mano de obra son hondureños.
El templo levantado en una extensión de unos 55.000 metros cuadrados, tiene un tamaño de 2.624,8 metros cuadrados y una altura de 41,2 metros.
En su construcción se utilizaron, entre otros materiales, granito gris y baldosa de piedra china, con detalles en piedra caliza de Marruecos y traventina de Turquía, y madera de arce y caoba.
El templo mormón brindará servicio a unos 233.000 miembros de la iglesia en Tegucigalpa y Nicaragua, dijo Martino, quien también se refirió a la proyección de su iglesia donando alimentos a gente necesitada y su apoyo a programas de vivienda.
El consejero recordó que en Honduras la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días comenzó su andadura en 1952, cuando vino a Tegucigalpa el líder Spencer Kimball para reunirse con el entonces presidente hondureño, Juan Manuel Gálvez.
Un año después, el 21 de marzo de 1953, cinco hondureños eran bautizados como los primeros miembros y al día siguiente se organizó oficialmente la primera congregación en la capital hondureña, acotó Martino.
La segunda congregación de los mormones en Honduras se organizó en San Pedro Sula, norte, en 1955, mientras que el primer centro de reuniones fue inaugurado en Tegucigalpa en 1963.
Según indicó Martino, en Honduras hay unos 153.000 miembros de esa denominación aglutinados en unas 227 congregaciones.
A partir del sábado y hasta el 2 de marzo próximo el templo estará abierto al público, con recorridos guiados entre las 08.00 y las 17.00 horas locales (de las 14.00 a las 23.00 GMT).
El templo es el sexto en Centroamérica. Los cinco restantes en la región se localizan en Guatemala (dos), El Salvador, Costa Rica y Panamá.
Los templos de los mormones, considerados como «la casa del Señor», son diferentes a los centros de reuniones o capillas, donde sus miembros se reúnen para sus servicios religiosos los domingos.
En ellos «se reafirman las enseñanzas de Cristo por medio del matrimonio, el bautismo y otra ordenanzas y convenios que unen a las familias por la eternidad», explicó Martino.
«No es algo barato, pero no sé. Se han utilizado los mejores materiales para construir el templo que es la casa de Dios», respondió Martino cuando se le preguntó el coste del lujoso templo, en el que señaló que la mayoría de los materiales y mano de obra son hondureños.
El templo levantado en una extensión de unos 55.000 metros cuadrados, tiene un tamaño de 2.624,8 metros cuadrados y una altura de 41,2 metros.
En su construcción se utilizaron, entre otros materiales, granito gris y baldosa de piedra china, con detalles en piedra caliza de Marruecos y traventina de Turquía, y madera de arce y caoba.
El templo mormón brindará servicio a unos 233.000 miembros de la iglesia en Tegucigalpa y Nicaragua, dijo Martino, quien también se refirió a la proyección de su iglesia donando alimentos a gente necesitada y su apoyo a programas de vivienda.
El consejero recordó que en Honduras la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días comenzó su andadura en 1952, cuando vino a Tegucigalpa el líder Spencer Kimball para reunirse con el entonces presidente hondureño, Juan Manuel Gálvez.
Un año después, el 21 de marzo de 1953, cinco hondureños eran bautizados como los primeros miembros y al día siguiente se organizó oficialmente la primera congregación en la capital hondureña, acotó Martino.
La segunda congregación de los mormones en Honduras se organizó en San Pedro Sula, norte, en 1955, mientras que el primer centro de reuniones fue inaugurado en Tegucigalpa en 1963.
Según indicó Martino, en Honduras hay unos 153.000 miembros de esa denominación aglutinados en unas 227 congregaciones.A partir del sábado y hasta el 2 de marzo próximo el templo estará abierto al público, con recorridos guiados entre las 08.00 y las 17.00 horas locales (de las 14.00 a las 23.00 GMT).
El templo es el sexto en Centroamérica. Los cinco restantes en la región se localizan en Guatemala (dos), El Salvador, Costa Rica y Panamá.
Los templos de los mormones, considerados como «la casa del Señor», son diferentes a los centros de reuniones o capillas, donde sus miembros se reúnen para sus servicios religiosos los domingos.
En ellos «se reafirman las enseñanzas de Cristo por medio del matrimonio, el bautismo y otra ordenanzas y convenios que unen a las familias por la eternidad», explicó Martino.
