Tegucigalpa – En Honduras la oposición partidaria está desarticulada y en general “no ha construido nada… se ha quedado como simple espectadora” y los nuevos partidos tienen los vicios tradicionales, señaló el ex fiscal hondureño y dirigente Liberal Edmundo Orellana Mercado.
– Oposición política no tiene brújula ni ha constituido nada dice el también dirigente liberal, quien achaca al oficialismo la división de entre opositores.
“Ni mi partido (Liberal), ni ningún partido de oposición han construido nada, se han quedado simplemente como espectadores por un lado, y por otro lado, han sido víctimas del problema interno”, remarcó para luego señalar que muchos de los dirigentes están condicionados por el gobierno en torno a los beneficios de las transferencias municipales en el caso de algunos alcaldes y a otros beneficios en lo relativo a ciertos diputados.
Ante esa aseveración Proceso Digital preguntó a Orellana –¿Le faltará a estos alcaldes capacidad de liderazgo o dignidad para rechazar esta situación?– a lo que él respondió: “Bueno en Honduras hay mucho de eso de la palmadita. El otro día se reunió el presidente (Juan Orlando Hernández) con ellos (alcaldes) y les dijo que eran los mejores alcaldes del mundo y les garantizaba las transferencias. Con eso no hay necesidad de rebelarse, les están diciendo que son buenos y que les van a dar dinero, no tienen por qué rebelarse, se sienten como compensados sobre todo si es un partido de oposición el que se los está diciendo”.
Luego agregó: “Y en el caso de los diputados, históricamente las bancadas tradicionales tanto del Partido Liberal como del Partido Nacional más han respondido a estímulos personales que a estímulos de partido, entonces los diputados igual responden a esas palmaditas y a esas expresiones de que son buenos diputados”.
El ex fiscal Orellana dijo que estas circunstancias hacen ver el panorama político hondureño “muy enrarecido porque desafortunadamente los partidos de oposición que son mayoría en el Congreso Nacional, que tuvieron una significativa cantidad de votos en las últimas elecciones, han sido incapaces de plantear una oposición organizada de suerte que puedan proponerle al gobierno en un frente común de alternativas”.
Reconoció que la administración nacionalista está enfrentando problemas de la agenda nacional como el tema de la seguridad, pero dijo que hay otras áreas en la que la oposición podría plantear política y posiciones claras como en salud, educación, agro e inversión.
“Es cierto que el tema de la seguridad es prioritario, pero también está la salud, la educación, no solamente en recomponer la parte administrativa sino también en la parte sustantiva que es la prestación del servicio que no vemos que se mejore sustancialmente” expresó.
De cara al fraccionamiento de la oposición en la Cámara Legislativa, Edmundo Orellana atribuyó parte de la división en los partidos Libertad y Refundación (Libre) y Anticorrupción (PAC), a una estrategia del Partido Nacional en el poder.
“Esto es una estrategia que se ha visto del inicio, es el propósito de dividir la oposición, al final de cuentas quien gana con estas crisis internas de la oposición es el partido de gobierno, debilitando a sus adversarios ellos se fortalecen, porque el pueblo que esperaba de estos partidos nuevos está viendo que no son más que una reproducción de lo que ha visto en el pasado”, expresó Orellana quien además ha ocupado varias carteras ministeriales, puestos en el servicio público y una curul en el parlamento hondureño.
A su juicio, la falta de estructura de los partidos de oposición debilita la democracia en el país porque no se equilibran las fuerzas. “Siempre el partido de gobierno se va a imponer porque los demás están divididos y no hay duda que la mano de ellos está allí”, recalcó.
Al referirse al papel del coordinador de Libre, Manuel Zelaya, en torno a la crisis interna en ese novel instituto político, Orellana dijo que “el ex presidente Zelaya tiene un modo sui generis de manejar las cosas, así ha sido como jefe de movimiento, como jefe del partido y como presidente… sus líneas de dirección siempre han sido muy especiales, propias de él de su carácter. Seguramente lo que hoy estamos viendo es consecuencia de eso”, puntualizó.