Tegucigalpa – “Los migrantes hondureños se deben acoger como hermanos”, subrayó la Iglesia Católica, durante su homilía dominical pronunciada este día en la Iglesia Catedral de Tegucigalpa, capital de Honduras.
La eucaristía fue celebrada por el padre Carlos Magno, quien destacó que “amar al prójimo es hacerle el bien”.
Manifestó que es “importante revisar nuestra caridad con los hermanos migrantes”.
Indicó que a los retornados que vienen de Estados Unidos, de México y de otros países, “tenemos que acogerlos como hermanos”.
Al mismo tiempo, dijo que “ojalá que en Honduras se creen las oportunidades para que nadie tenga que salir de su casa y de su tierra”.
“Que aquí encuentren las oportunidades para sostener las necesidades de su familia y no que se expongan a ese peligro de la ruta migratoria”, añadió.
No obstante, dijo que “siempre habrá movilidad humana, siempre vamos a tener migrantes, dentro de Honduras y fuera de Honduras o regresando a Honduras”.
En ese sentido, reiteró que “cada día tenemos que ser más solidarios, tenemos que acogerlos más para vencer los males que provoca la emigración”.
Se estima que 1 millón de ciudadanos hondureños se encuentran en Estados Unidos y son los que con el envío de remesas sostienen la economía nacional.
