México – «La Gioconda» de Da Vinci y «La escuela de Atenas» de Rafael encabezan la exposición «Leonardo, Rafael, Caravaggio: Una muestra imposible», con la que el Centro Nacional de las Artes (Cenart) acerca al público mexicano las obras de los tres maestros a través de reproducciones digitales.
La muestra reúne, a través de tres módulos monográficos, un total de 57 recreaciones a tamaño real de piezas que se encuentran originalmente en museos europeos, iglesias y colecciones privadas.
En la inauguración de la exposición, el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Rafael Tovar y de Teresa, subrayó que las réplicas permiten una contemplación más accesible y detallada que las de sus homólogas originales.
«Tan sólo para ver ‘La última cena’, de Da Vinci, en el Museo de San Marco, uno tiene que pedir una cita con varios meses de anticipación, luego entrar por varios minutos a un espacio de descontaminación para no afectar la obra, y luego, con un grupo de máximo 30 personas, se dispone de sólo 15 minutos para verla a una altura de aproximadamente cinco o seis metros», destacó.
La técnica con la que se han realizado las reproducciones, continuó, permite «reproducir la luminosidad y el grano de los fondos», así como las características con las que se exponen en los museos.
Todo ello se traduce en «una nueva forma de promover y difundir la cultura a través de las nuevas tecnologías», afirmó el titular de Conaculta.
El «Baco enfermo» y el «Narciso», de Caravaggio, y «La dama del armiño» y «La última cena», de Da Vinci, son algunas de las reproducciones que podrán contemplarse hasta el próximo mes de abril.
La exposición se enmarca en los actos previstos para celebrar el Año de Italia en América Latina, por lo que en la inauguración también estuvo presente el embajador italiano en México, Alessandro Busacca.
Busacca expresó que la muestra nace en un momento en el que se está desarrollando una «atenta reflexión» sobre el futuro de los museos: «En la época de la reproducción digital, la difusión verdaderamente masiva de las grandes obras solo puede ser garantizada a través de las nuevas tecnologías», aseveró.
Además, proyectos como «Una muestra imposible» abren una «nueva vía» para que las generaciones jóvenes «conozcan la experiencia de admirar las grandes obras de todos los tiempos» y evitan las dificultades que implica el traslado de piezas de un lugar a otro.
El Cenart también organizará, durante los tres meses en los que permanecerá expuesta la muestra, actividades como ciclos de cine, talleres, visitas guiadas y conferencias magistrales, para ayudar al público a que profundice en las obras y las contextualice.
Es la primera vez que el conjunto se expone en América Latina, después de pasar, desde el año 2003, por varias ciudades italianas y por Chicago (Estados Unidos).