Tegucigalpa – El presidente Juan Orlando Hernández dijo que en caso que no se sancionen las reformas penales en su tercer y último debate en el pleno del Congreso hondureño, estará enviando un decreto para consultar al pueblo sobre si está a favor o en contra de aprobar esta normativa.
– Calificó la postura de la oposición política como la promesa que hicieron en la campaña pasada de enviar los militares a los cuarteles.
El mandatario volvió a urgir a los “padres de la patria” de todas las bancadas para que aprueben las reformas penales que promueve para bajar los índices de criminalidad e incluir la figura de terrorismo en la normativa vigente.
Exteriorizó que “si miramos que el Congreso y los líderes de la oposición: don Salvador Nasralla, Manuel Zelaya Rosales siguen diciéndole a sus bancadas que no voten por la reforma, como lo han dicho públicamente, y no se logran los votos requeridos, no nos queda más que mandar un decreto al Congreso y que ellos debatan en qué momento se hará la consulta”.
Dijo que “escuché algo la semana pasada que en efecto se percibía una especie que unos decían dando y dando o trueque, otros dijeron extorsión a cambio de las reformas penales que le dieran a PAC y Libre un representante en el Tribunal Supremo Electoral”.
Refirió que el Partido Nacional apoyó la modificación constitucional para que se ampliara la representación política en el Tribunal Supremo Electoral (TSE) en el entendido de hacer las audiencias públicas para la elección de los mismos.
Reflexionó que sería triste que la oposición condicione las reformas penales a cambio de otorgarles un representante en el órgano electoral.
A renglón seguido, manifestó que “por qué no hacemos una cosa, por qué no hacemos una consulta y le preguntamos al pueblo hondureño que se pronuncie, si es que los diputados no tienen claro de qué estamos hablando, preguntémosle al pueblo en las urnas”.
Planteó la posible pregunta de la consulta popular: “Considera usted un acto de terrorismo lo que hacen las maras y pandillas cuando sustituyen la voluntad del ciudadano al momento de infundirle un miedo insuperables o es un acto de protesta pública cuando hemos vista en los bulevares que van a incendiar los restaurantes”.










