Tegucigalpa – La exmagistrada del Tribunal Superior de Cuentas (TSC), Daysi Oseguera de Anchecta, pidió a los miembros de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que investigue actos de corrupción en la administración del derrocado expresidente Manuel Zelaya.
En una carta dirigida a los representantes de la CIDH que visitan en este momento el país, la exmagistrada solicitó que investiguen casos como “El carretillazo”, en el que funcionarios de Zelaya sustrajeron en una carreterilla 40 millones de lempiras de las bóvedas del Banco Central de Honduras, asimismo el saqueo de instituciones, mal manejo de fondos, proyectos mal invertidos y la pérdida de millones de lempiras por el tráfico gris, entre otros.
La exfuncionaria indicó que Honduras ha dado muestras de buena voluntad en la lucha contra la impunidad al contar con la presencia de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), para fortalecer la institucionalidad en el país.
Manifestó que tiene esperanza que el CIDH que siga apoyando y observando al país en la protección de los derechos humanos y el combate a la impunidad y la corrupción.
Oseguera de Anchecta destacó que es importante que Honduras dé un paso importante en el fortalecimiento a la ciudadanía para que tengan oportunidades de desarrollo y protección.
La exfuncionaria del TSE, refirió que Mel Zelaya está en contra de la Constitución de la República y si el día de mañana logra armar un propósito “nos puede a mandar a volar”.
Igualmente afirmó que “mis dos compañeros y yo firmamos pliegos de responsabilidades, informes penales de los gobiernos de Porfirio Lobo Sosa y de Juan Orlando Hernández”.
Lamentó que “tenemos personas del Partido Nacional y Liberal que han sido llevadas a los tribunales de justicia, pero a éstos -se refiere a los de Libre-, ninguno”.
El fin de semana, el exmandatario Zelaya mediante una misiva requirió el apoyo de los representantes de la CIDH para que Honduras cumpliera los acuerdos de Cartagena y San José, sin embargo, estos manifestaron que no era su función.
