Londres – El extenista alemán Boris Becker, seis veces campeón de Grand Slam, reconoció que lamenta haber ganado Wimbledon con apenas 17 años debido a la enorme presión que esta victoria ejerció sobre él durante y después de su carrera profesional.
«Cuando gané Wimbledon con 17 años, estás tratando de madurar y de encontrar tu sitio en el mundo. Después de ganar, hagas lo que hagas, vayas donde vayas, con quien hables, se convierte en una sensación mundial y ocupa los titulares de los periódicos más importantes. Cuando empiezas una segunda carrera, todo se mide por este éxito de ganar Wimbledon a los 17 y eso cambió el camino que tenía por delante. Estoy feliz de haber ganado tres, pero tal vez 17 era demasiado joven. Todavía era un niño», reconoció a BBC Sport.
El alemán tenía 17 años, siete meses y 15 días cuando derrotó a Kevin Curren en 1985, convirtiéndose en el campeón más joven de la historia del torneo en categoría masculina.
Becker ganó otros cinco Grand Slam, incluidos dos más en Wimbledon, y posteriormente, entrenó a Novak Djokovic durante tres años entre 2013 y 2016, ayudando al serbio a ganar seis de sus 24 ‘Grandes’.
En 2022, el extenista cumplió ocho meses de una sentencia de dos años y medio de prisión en Londres por ocultar activos y préstamos por valor de 2,5 millones de libras para evadir deudas y vio el triunfo de Djokovic en Wimbledon desde prisión.
«Yo estaba apoyando a Djokovic y vi cuando ganó contra Nick Kyrgios. Fue muy inspirador y emocional para mí. Me puso en perspectiva al ver que Novak estaba ahí y yo en una de las peores prisiones del mundo», confesó.
«Estaba demasiado cómodo y tenía demasiado dinero. Nadie me dijo ‘no’. Todo era posible. En retrospectiva, esa es la receta para el desastre», añadió Becker, que fue deportado del Reino Unido tras su liberación.
Becker fue campeón de tres ediciones de Wimbledon (1985, 1986 y 1989), dos del Abierto de Australia (1991 y 1996) y una del Abierto de Estados Unidos (1989); además, conquistó la Copa Davis con Alemania en dos ocasiones, 1988 y 1989; y en 1991 ocupó durante varias semanas el número 1 del ránking ATP. EFE