Redacción deportes – El Nottingham Forest tomó aire con una victoria balsámica ante el Southampton (4-3), abandonó los puestos peligrosos de la Premier League y dejó a su rival al borde del descenso matemático a la Segunda División de Inglaterra.
El Southampton no aprovechó su penúltimo cartucho ante un rival directo. Tenía que ganar sí o sí para no asomarse al abismo. Siempre contracorriente a lo largo de los noventa minutos, al final cedió todos los puntos y acabó la jornada a ocho unidades de la salvación cuando quedan nueve por disputar.
Su descenso es casi un hecho. Sólo un milagro evitaría la desgracia para los hombres dirigidos por el técnico español Ramón Selles, que iniciaron el camino hacia la derrota entre los minutos 18 y 21, cuando Taiwo Awoniyi provocó el comienzo de la debacle del Southampton.
El delantero nigeriano abrió el marcador tras aprovechar un pase desde la línea de fondo de Brennan Johnson y aumentó la renta con una volea espectacular, a la media vuelta desde el punto de penalti, con la que encarriló el duelo para el Nottingham Forest.
Aunque el argentino Carlos Alcaraz recortó distancias, antes del descanso Morgan Gibbs-White, desde el punto de penalti, celebró el 3-1 que parecía que iba a ser definitivo. Sin embargo, el Southampton, en un arranque de orgullo, volvió a meterse en el partido gracias a un cabezazo de Lyanco a la salida de un córner en los primeros minutos de la segunda parte.
Al equipo de Selles aún le restaba 39 minutos para pelear por frenar su caída hacia el infierno de la Segunda División. No lo consiguió. Apenas se acercó a la portería defendida por Keylor Navas y el Nottingham Forest sentenció al final con un disparo de Danilo que maquilló en el tiempo añadido James Ward-Prowse desde los once metros.
Al final, aunque el Southampton murió en la orilla del empate, perdió tres puntos clave y es virtualmente equipo de Segunda División. Le acompañarían el Leeds United y el Leicester, los otros dos clubes que perderían la categoría a falta de tres jornadas para que termine la temporada. EFE
