Roma – El Nápoles dejó escapar este lunes una oportunidad gigante de colocarse a solo un punto del Inter de Milán, líder de la Serie A, al empatar ante un gran Bolonia (1-1) en un partido en el que se adelantó muy pronto con un gol de Zambo Anguissa pero en el que acabó sufriendo las acometidas de los boloñeses, desatados en busca de la victoria.
La Serie A no da respiro por ninguna parte. El Nápoles tenía una oportunidad de oro tras el empate del Inter para recortar dos puntos y colocarse a solo uno a falta de 7 jornadas. Se queda, por el momento, todavía a tres. Y el Bolonia, uno de los mejores equipos esta temporada, en plena pelea por los puestos de Liga de Campeones y semifinalista de la Copa Italia, rozó superar al Atalanta para colocarse tercero en la tabla.
Tuvo la remontada en su pies, de hecho, el argentino Santiago Castro en la última jugada del partido. Clarísima. Remató Holm de cabeza en un saque de esquina, paró Scuffet y en el rechace, casi bajo palos, a Castro no le dio tiempo a reaccionar y su golpeo con una rodilla se marchó rozando un palo. Respiró aliviado el Nápoles, que vio en ese momento cómo se le escapaban buenas opciones de título.
Pero al final, tablas en un partido tremendamente igualado y de poder a poder. Superior el Nápoles en la primera mitad, superior el Bolonia en la segunda. Objetivos intactos para ambos. Los de Antonio Conte, vivos en la pelea por el ‘Scudetto’ y los de Vinenzo Italiano bien colocados para el objetivo ‘Champions’.
El calendario final del Nápoles es mucho más amable en estas jornadas finales. Sus rivales son todos de la parte baja de la tabla, aunque este equipo ha rendido mejor con los de arriba. Por eso el empate ante el Bolonia no es mal resultado para los partenopeos.
Y más teniendo en cuenta cómo acabó el partido. Porque el Nápoles, después del dominio en la primera mitad que materializó con un golazo de Anguissa, desapareció en la segunda. En el minuto 18, el centrocampista camerunés exhibió su poderío físico, su zancada, para dejar atrás a cuatro jugadores y firmar el gol de la jornada.
En un balón largo mal defendido por Lucumí ante Lukaku, emergió la figura de Anguissa como un tren desde el centro del campo para arrollar a Holm, Miranda y Skorupski, al que regateó para definir a puerta vacía con la zurda.
Poco más generó el Nápoles desde el gol. Y el Bolonia, en la segunda mitad, se creció. Empezó a generar peligro por el lado izquierdo con Juan Miranda y consiguió igualar el duelo con un golazo de Ndoye, rematador con un precioso tacón en el minuto 64 para lanzar la idea de la remontada. Se volcó el combinado de Italiano, pero no pudo certificar la machada. La rozó con la ocasión de Castro.
El empate dejó un sabor de boca amargo al Nápoles, que perdió una gran oportunidad de recortar al líder. El calendario le sonríe y quedan siete jornadas. Está muy vivo en la pelea por el ‘Scudetto’. Y el Bolonia quiere volver a la ‘Champions’ la próxima temporada.
— Ficha técnica:
1 – Bolonia: Skorupski (Ravaglia, m.25); Holm, Beukema, Lucumí, Miranda; Freuler, Ferguson; Orsolini (Cambiaghi, m.77), Odgaard, Ndoye; Dallinga (Santiago Castro, m.77).
1 – Nápoles: Scuffet; Di Lorenzo, Rrahmani, Juan Jesus, Olivera; Anguissa, Lobotka, McTominay (Gilmour, m.70); Politano, Neres (Raspadori, m.74) y Lukaku.
Goles: 0-1, m.18: Anguissa; 1-1, m.64: Ndoye.
Árbitro: A. Colombo. Mostró tarjeta amarilla a Aebischer (m.93) por parte del Bolonia; y a Di Lorenzo (m.60), Olivera (m.79) y Anguissa (m.89) por parte del Nápoles.
Incidencias: encuentro correspondiente a la trigésima primera jornada de la Serie A disputado en el Estadio Olímpico de Roma. EFE
