spot_img

Niñez hondureña envuelta en el círculo de la violencia y la emigración

Tegucigalpa – Honduras conmemora hoy el Día del Niño en medio de un círculo de violencia, exclusión y un éxodo permanente de menores que dejan sus poblados huyendo de la interminable espiral.

 

Este país tiene su mayor población en niñez y adolescencia, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), que destaca que en este país centroamericano existe un millón 804 mil niñas y adolescentes, así como un millón 855 mil 379 niños y adolescentes, para un total de tres millones 659 mil 424.

 

Barrigas vacías

Según el sociólogo Eugenio Sosa, la niñez hondureña enfrenta los mayores problemas de seguridad alimentaria, frente a la población en general.

 

Indicó que en Honduras existen más de dos millones de niños en situación de pobreza y “cuando se agarran problemas como la sequía del sur, en las zonas rurales, la pobreza es mucho más profunda, por lo tanto este tema de seguridad alimentaria, la niñez es la que sufre las mayores dificultades”.

 

Según datos, en Honduras se han identificado 124 municipios afectados por la sequía distribuidos en 13 departamentos del país, de los cuales, 64 se encuentran priorizados por la condición de crisis grave y 60 en crisis alta.

 

En el caso de los 64 municipios se estima que unas 76 mil 712 familias de pequeños productores estarían siendo afectados por la sequía de los cuales 37 mil 131 son productores de maíz, 14 mil 075 productores de frijol y 25 mil 506 de maicillo.

 

Educación

5Otro mal que está aquejando a la niñez nacional es el rezago existente en cuanto a la calidad de educación, el analista dijo que al tomar los datos de educación, Honduras ha mejorado en cobertura, pero no se puede decir lo mismo en calidad.

 

Sosa dijo que las zonas más deprimidas, rurales y marginadas es donde el atraso educativo es superior, “como si fuera una educación pobre para personas pobres”.

 

El crimen en las escuelas

El sociólogo lamentó que hay “centros educativos que se han convertido en zonas de violencia, donde se registran hechos criminales y hasta cobran extorsión a los maestros y alumnos”.

 

Consecuentemente dada la violencia, dentro de las aulas se refleja la necesidad de sembrar un ambiente de paz en los centros educativos, reflexionó.

 

En las últimas fechas, se han registrado diferentes eventos en los centros educativos como golpizas a maestras, disparos a estudiantes y hasta asesinatos a docentes frente a los alumnos mientras les imparten clases.

 

Violencia

Pero en Honduras, la violencia toca a todos los sectores y la niñez hondureña forma parte de las estadísticas de hechos sangrientos ocurridos en el país.

 

De acuerdo a los datos de Casa Alianza, en lo que va del presente año más de 700 niños y jóvenes menores de 18 años han muerto violentamente.

 

En base a ello el sociólogo dijo que la población menor se encuentra expuesta a la violencia “siendo doblemente víctimas porque también son utilizados por adultos involucrados en el crimen organizado para cometer acciones que al final los llevan a la muerte o a un centro de reclusión”.

 

La proliferación de niños sicarios, pandilleros y extorsionadores en Honduras, es un fenómeno recurrente y ampliado.

 

1

Emigración

Cabe señalar que la violencia también es una de las causas que ha orillado a muchos niños hondureños a tomar la ruta migratoria.

 

Cada día es mayor el flujo de niños solos o acompañados que salen de Honduras con el objetivo de buscar el denominado “sueño americano”; prueba de ello son los menores hondureños que abandonaron el país desde octubre anterior rumbo a los Estados Unidos, en un éxodo que registra por lo menos 60 mil menores del Triángulo Norte de Centroamérica. Por lo menos 13 mil hondureños han cruzado fronteras desde entonces hasta llegar a la unión americana.

 

Sosa dijo que inicialmente se consideraba que la principal causa de emigración era la búsqueda de oportunidades, pero que a ello se ha sumado la violencia, cambiando el patrón migratorio de los pequeños catrachos.

 

“Los menores ya no sólo emigran por la pobreza, sino por amenazas, extorsión y violencia en general, algunos piden protección o asilo”, dijo.

 

Trata

6La trata humana también es un tema que se encuentra vinculado a la emigración porque a raíz de que diariamente niños y niñas buscan salir de Honduras, los mismos se vuelven víctimas del “comercio humano”.

 

Recientemente el delegado regional de los Derechos Humanos, Rolando Milla Hernández, informó que muchos de estos menores, terminan siendo víctimas de las redes de prostitución que se encuentra en el occidente de Honduras.

 

Mientras en la ruta migratoria, muchos son prostituidos en Guatemala y México; otros son utilizados como mulas del narcotráfico y no son menos los que se unen a bandas de sicarios y carteles criminales, obligados por los jefes criminales.

 

Doblemente víctimas

Con lo antes señalado, el experto es del criterio que se debe evitar atribuirles a los niños y jóvenes como principales responsables de la violencia.

 

A su juicio la responsabilidad deviene de los adultos que les involucran.

 

 “Son doblemente víctimas porque sufren la violencia y porque son involucrados en la misma”, remarcó.

 

Para concluir, Sosa acentuó que señalarlos como culpables  “se vuelve un círculo vicioso de reproducción de la violencia, de las carencias, de las necesidades y de varias cosas  en la niñez hondureña”.

 

spot_img
spot_img
spot_img

Noticias recientes

spot_img
spot_img