Tegucigalpa – Honduras amplió sus escudos para combatir el flagelo del narcotráfico, luego que este miércoles el Congreso aprobara la Ley de Interdicción Marítima con la que se da luz verde para que la Fuerza Naval pueda interceptar embarcaciones sospechosas de llevar droga, dinero, armas o cualquier material ilícito.
La Ley de Interdicción Marítima es complementaria a la Ley de Interdicción Aérea, ambas creadas para la defensa integral de este país centroamericano en su lucha contra el narcotráfico, una situación que se replica en los altos índices de muertes violentas, según justifica el Gobierno.
Honduras registra 15 homicidios diarios, de acuerdo a índices oficiales.
Mientras el Congreso Nacional aprobaba la Ley de Interdicción Marítima, el jefe del Ejecutivo, Juan Orlando Hernández, hablaba en su intervención ante la Asamblea de las Naciones Unidas, sobre la necesidad de «fuerza multinacional» para luchar contra el tráfico de drogas, porque los problemas que genera se equiparan a los del radicalismo islámico.
«¿Cuál es la diferencia entre los efectos causados por el terrorismo de los radicales fundamentalistas y el terrorismo de los que mueven el narcotráfico?», afirmó el gobernante de Honduras al intervenir ante la Asamblea General de la ONU.
Esa «fuerza multinacional», dijo Hernández, debe ser «capaz de enfrentar con éxito un fenómeno que es transnacional, en su organización, su mercado, sus proyecciones y su financiamiento».
Es importante mencionar que Honduras y el resto de países de Centroamérica figuran en una lista de naciones señaladas por Estados Unidos de «afectar significativamente a Estados Unidos» en el tránsito de droga hacia esa potencia mundial.
Con respecto a Centroamérica, las agencias federales estadounidenses estiman que alrededor del 84% de la cocaína que entra a Estados Unidos pasa antes por esa región y México.
El informe de Washington subraya que aunque Colombia, Perú y Bolivia continúan produciendo el 100% de la coca utilizada para la cocaína a nivel mundial, los tres países siguen reduciendo la producción y actualmente ésta registra los números más bajos desde 1990.
La aprobación del escudo marítimo
Este miércoles, al Parlamento hondureño aprobó en tercer y último debate la Ley de Interdicción Marítima.
En el decreto se establece que el objetivo de la ley es proteger la soberanía de las aguas hondureñas y primordialmente para combatir la amenaza del narcotráfico y otras actividades del crimen organizado a través del mar territorial.
Cabe recordar que en julio pasado, se habían aprobado cinco artículos en último debate de la referida norma, pero la discusión fue suspendida a petición de las secretarías de Derechos Humanos, Justicia, Gobernación y Descentralización y de Defensa Nacional, a fin de poder socializar algunos puntos que hacían falta en a los restantes 11 artículos que incluye la normativa.
El proyecto de decreto que fue presentado ante la Cámara Legislativa por el diputado nacionalista, David Chávez, fue dictaminado por la comisión ordinaria de seguridad y protección ciudadana, con el propósito de establecer las normas que regirán la defensa del espacio insular y marítimo del Estado de Honduras en su calidad de Estado ribereño y Estado del pabellón en ejercicio de su soberanía, derechos soberanos y en atención a sus más altos intereses de seguridad y defensa integral.
Para este fin se emplearán procedimientos de interdicción marítima con acciones de persuasión, visita, inspección, derecho de persecución y movilización o detención de toda embarcación propulsada o no u objeto que sin ser embarcación sea razonablemente sospechosa de infringir normas nacionales o internacionales.
La ley es aplicable a las naves, embarcaciones y objetos que, sin ser naves, estén sometidos a la jurisdicción de la República de Honduras en virtud de su nacionalidad, de su posicionamiento en aguas jurisdiccionales de Honduras o en virtud de la ejecución de normas de derecho internacional.
Quedarán fuera del ámbito de su aplicación los buques de guerra, mismos que gozan de inmunidad soberana y sólo podrán ser abordados por autoridades competentes con permiso del comandante del buque.
A los efectos de la ley se entiende por interdicción marítima los procedimientos que, avalados bajo derecho nacional e internacional, son ejecutados por aeronaves o embarcaciones militares de la República de Honduras con la finalidad de establecer ejecución jurisdiccional por vía marítima o aérea y por sobre una embarcación razonablemente sospechosa de cometer ilícitos en el mar o amenazar intereses de seguridad nacional.
Según esta ley, toda nave o embarcación podrá ser objeto de medidas de Interdicción marítima -incluyendo la persuasión, visita, inspección, persecución, inmovilización o detención de naves- en los siguientes casos:
Cuando la nave sea designada blanco de interés, cuando se presuma razonablemente que la nave, embarcación u objeto, atenta contra la soberanía nacional o su utilidad tenga conexión con actividades ilegales y cuando sea identificada como una nave hostil.
La ley contiene 16 artículos y 14 literales que expresan la conceptualización de la norma, en el marco de una discusión en la que hicieron sus aportes varios diputados conocedores del tema.
El prosecretario del Congreso Nacional, Tomás Zambrano, explicó que ya se habían aprobado los primeros cinco artículos del decreto, pero a petición de los miembros de la comisión de seguridad y protección ciudadana, del artículo seis al 16, fueron enviados para una opinión de la Cancillería a fin de que la ley no viniera a contravenir los convenios internacionales de los que Honduras forma parte, principalmente en el derecho marítimo.
Añadió que la gerente legislativa del Congreso Nacional, Karen Motiño, sostuvo varias reuniones en la Cancillería, con los asesores legales de Relaciones Exteriores así como de la Fuerza Naval y la Secretaría de Defensa, instituciones que enviaron algunas sugerencias en el articulado que fue remitido para consulta.
