París.- Reporteros Sin Fronteras (RSF) celebró hoy la condena a cadena perpetua pronunciada en Honduras contra tres asesinos del periodista Alfredo Villatoro, en 2012, y animó a las autoridades del país a que acrecienten sus esfuerzos contra la impunidad y la protección de los profesionales de la información.
Villatoro, coordinador de noticiarios y locutor de la radio HRN, una de las principales empresas de radio del país centroamericano, fue secuestrado el 9 de mayo de 2012 cuando se dirigía a su trabajo y encontrado muerto el 15 de mayo de 2012.
La Corte Suprema de Justicia de Honduras condenó el pasado 11 de junio a tres autores materiales del crimen, Marvin Alfonso Gómez, Osman Fernando Osorio Argujo y a su hermano Edgar Osorio Argujo, acusados de secuestro agravado y asesinato.
Al celebrar el avance que supone ese veredicto, «un paso adelante en la lucha contra la impunidad», RSF aplaudió que el Congreso Nacional aprobase este 4 de junio, en primer debate, el decreto para la creación de una ley de protección de periodistas.
Algo que consideró una «alentadora noticia para la libertad de información en el país».
Precisó, no obstante, que todavía no se ha hecho público el texto de la Ley de Protección de Defensores de Derechos Humanos, Periodistas, Comunicadores Sociales (medios de comunicación comunitarios, blogueros, netciudadanos) y Operadores de Justicia, presentado por el Poder Ejecutivo.
Al respecto, RSF dijo esperar que dicho proyecto de ley pueda evitar que crímenes como los de Villatoro se reproduzcan, y recordó que hacía ya «mucho tiempo» que era esperado en Honduras, «país que registra uno de los índices de homicidios más altos del mundo».
En la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de Reporteros sin Fronteras, Honduras se encuentra en el lugar 129, entre 180 países.
De ahí, sin duda, que el Estado hondureño pueda «ir más allá» en opinión de RSF, «abriendo este proyecto a una amplia discusión con la sociedad civil, en especial con las organizaciones de defensa de los derechos humanos».
Con ocasión del juicio y del asesinato de Villatoro, la página web «ElHeraldo.hn» informó de que Karlo Villatoro, hijo de ese periodista «siempre implacable en la lucha contra la corrupción», había pedido que el caso no se cerrase con la condena de los autores materiales, «ya que resta deducir responsabilidades a los autores intelectuales del crimen».
La Corte Suprema de Justicia de Honduras condenó el pasado 11 de junio a tres autores materiales del crimen, Marvin Alfonso Gómez, Osman Fernando Osorio Argujo y a su hermano Edgar Osorio Argujo, acusados de secuestro agravado y asesinato.
Al celebrar el avance que supone ese veredicto, «un paso adelante en la lucha contra la impunidad», RSF aplaudió que el Congreso Nacional aprobase este 4 de junio, en primer debate, el decreto para la creación de una ley de protección de periodistas.
Algo que consideró una «alentadora noticia para la libertad de información en el país».
Precisó, no obstante, que todavía no se ha hecho público el texto de la Ley de Protección de Defensores de Derechos Humanos, Periodistas, Comunicadores Sociales (medios de comunicación comunitarios, blogueros, netciudadanos) y Operadores de Justicia, presentado por el Poder Ejecutivo.
Al respecto, RSF dijo esperar que dicho proyecto de ley pueda evitar que crímenes como los de Villatoro se reproduzcan, y recordó que hacía ya «mucho tiempo» que era esperado en Honduras, «país que registra uno de los índices de homicidios más altos del mundo».
En la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de Reporteros sin Fronteras, Honduras se encuentra en el lugar 129, entre 180 países.
De ahí, sin duda, que el Estado hondureño pueda «ir más allá» en opinión de RSF, «abriendo este proyecto a una amplia discusión con la sociedad civil, en especial con las organizaciones de defensa de los derechos humanos».
Con ocasión del juicio y del asesinato de Villatoro, la página web «ElHeraldo.hn» informó de que Karlo Villatoro, hijo de ese periodista «siempre implacable en la lucha contra la corrupción», había pedido que el caso no se cerrase con la condena de los autores materiales, «ya que resta deducir responsabilidades a los autores intelectuales del crimen».