– Varios hechos similares han ocurrido especialmente en la zona occidental del país.
Mendoza Matute explicó que un grupo de pobladores que se encontraban en estado de ebriedad se enfrentaron a disparos contra agentes policiales, lo que dejó un civil muerto.
En ese sentido, la población enardecida determinó incendiar la posta policial, arguyó.
Indicó que el siniestro provocó daños a la administración pública y así como a los bienes de los uniformados asignados a esa posta policial el occidente de Honduras.
También dijo que ya entabló una conversación con el alcalde José Ángel Rivas Toledo para que se inicie una investigación con el objetivo de deducir responsabilidades a los responsables.
En julio de 2013, una patrulla policial de Arenal, Yoro, norte del país, fue incendiada por dos individuos que luego se dieron a la fuga.
Asimismo, en noviembre del año pasado, un grupo de pobladores de la comunidad de San Miguelito en el departamento de Intibucá, occidente de Honduras, quemaron una posta policial tras un enfrentamiento entre agentes del orden y un individuo que realizaba disparos al aire y que dejó a este último muerto.