Tegucigalpa – El pueblo del histórico puerto de Trujillo, Colón en el Caribe de Honduras, llora este miércoles el sensible fallecimiento del emblemático corresponsal de radioemisoras, don Julio Arriola Oliva, quien dejó de existir la madrugada de hoy a sus 98 años.
Los restos mortales del veterano corresponsal son velados en la Funeraria Municipal de su querida ciudad de Trujillo, donde vivió por muchos años en el histórico barrio Cristales.
Don Julio Arriola fue el pionero del periodismo en el departamento de Colón donde deja muchos recuerdos e historia entre sus amigos y familiares y la comunidad que hoy lloran su partida.
El reconocido corresponsal se dedicó por varias décadas a reportar las incidencias noticiosas a diferentes cadenas radiales del país desde la ciudad de Trujillo de una forma folklórica y espontánea que lo llevó a ser considerado un personaje del departamento de Colón.
Durante su vida Arriola recibió varios reconocimientos por su amplia trayectoria en los medios de comunicación y actualmente su voz inicia el programa Minuto Cultural Sabatino que dirige el periodista Germán Reyes con la frase “transmite radio América cadena nacional”.
El veterano comunicador se inició en la radiodifusión en los años 60 del siglo pasado, como corresponsal de HRN que también transmite desde la capital hondureña.
Arriola además fue corresponsal de varias emisoras locales en los departamentos de Atlántida, Yoro y Colón, en el norte de Honduras.
Desde hace varios años se retiró como corresponsal, pero seguió trabajando para emisoras locales de Trujillo y otras de la zona.
Su labor como corresponsal fue reconocida por instituciones públicas y privadas como la Universidad Metropolitana que lo homenajeó en una ceremonia que se celebró en Tocoa, Colón.
El comunicador de origen afrodescendiente afirmó en esa ocasión que seguiría trabajando hasta que Dios lo llamara a su seno.
Desde Proceso Digital nos sumamos a las muestras de pesar por la desaparición física de don Julio Arriola y nos solidarizamos con el dolor que embarga a sus familiares y a los trujillanos.
